Hoy es el último día de curso para este año de 2022. Luego vendrán las vacaciones de Navidad...
Exploramos hoy el Barrio de Justicia.
El barrio también se conoce como "Chueca", y es que la plaza más icónica, el centro neurálgico de la zona está precisamente dedicada al famoso compositor de zarzuelas.
Comenzamos nuestra visita en la Real Iglesia y Convento de las Mercedarias Reales. (Mercedarias Descalzas de la Purísima Concepción). También se conoce como la Iglesia de las góngoras, ya que se encuentra en la calle de Luis de Góngora.
En 1663, Felipe IV, agradecido por el nacimiento de su heredero, Carlos II, funda este convento. El convento lo funda sobre los terrenos de un ministro suyo, llamado Juan Jiménez de Góngora. El Caballero de la Orden de Alcántara Don Juan Felipe Jiménez de Góngora, ministro del Consejo de Castilla y miembro de la Cámara del Reyes.
Años más tarde (en el siglo XX) los funcionarios del ayuntamiento de Madrid, creyendo que era el mismo señor que el famoso escritor, rebautizaron la calle como Luis de Góngora, recordando al famoso poeta, rival eterno de Lope de Vega, Luis de Góngora y Argote. pero se trata de un craso error...
Es un conjunto barroco. Por fuera no se aprecia ni mucho menos la grandeza del interior.
La planta de la iglesia es de cruz latina, obra de Manuel del Olmo.
La decoración interior es de mediados del siglo XVIII.
A los lados, tenemos varios retablos barrocos y al fondo está el retablo del altar mayor. Es obra de Diego Martínez de Arce.
En el centro una imagen de la Inmaculada Concepción.
Además encontramos también en el retablo imágenes de Santa María de Cervelló y de la Beata Mariana de Jesús ambas de Juan Pascual de Mena. No se sabe quién es el autor de la imagen de la Inmaculada, aunque muchos piensan que es también de Juan Pascual de Mena.
Vista del Altar mayor
Retablo con la Virgen de Montserrat
Volvemos al exterior, y vemos, haciendo esquina, la Casa Palacio del Marqués de Viluma o de los Condes de Armildez de Toledo, del año 1857.
Seguimos avanzando en la visita y entramos, por la Travesía de Belén a un pequeño templo, la mar de curioso. Se trata de la iglesia de las Misioneras del Santísimo Sacramento y María Inmaculada, Cachito de Cielo. Depende de la Parroquia de Santa Bárbara.
Esta pequeña iglesia neogótica resulta bonita e interesante.
Parece ser que el curioso nombre le viene porque la capilla era pequeña y reflejaba los colores del cielo. Y además, por las nubes que adornan el altar mayor y que le dan aspecto de "cielo".
Está expuesto el "Santísimo" y esta capilla es de Adoración perpetua, es decir, siempre hay alguien velando... Siempre... 24/7.
La ley Canalejas de 1910, llamada también "ley del candado", prohibía durante dos años el establecimiento de nuevas órdenes religiosas en España y no permitía que se edificaran edificios religiosos de nueva planta.
La fundadora, María Emilia Riquelme y Zayas se las arregló para convencer a los propietarios del edificio para que lo convirtieran en un convento. Corría el año 1911.
Desde fuera parece un edificio de viviendas, incluso el portal de la iglesia es como el de cualquier otra comunidad de vecinos.
Existe un ventanal metálico, a modo de galería modernista que realmente tiene la función de ocultar las vidrieras del interior.
En la esquina de la calle Barquillo con la de Belén, nos encontramos con un edificio singular. En este lugar se encontraba la famosa Casa de Tócame Roque.
Se trataba de una antigua corrala, en la que vivían 72 familias de chisperos (trabajaban el metal y saltaban chispas con el uso de sus herramientas) tuvo muchas historias curiosas, era un lugar bullicioso, lleno de vida, con vecinos entrando y saliendo continuamente y que terminó con muchos problemas entre los dos hermanos herederos.
Los hermanos Roque y Juan discutían sobre la herencia..."Tócame a mí Juan, no tócame a mí, Roque... y así "ad nauseam"
De ahí la expresión "esto es como la Casa de tócame Roque"
De ahí la expresión "esto es como la Casa de tócame Roque"
Esta corrala sale incluso en una obra de Galdós, "Napoleón en Chamartín"
Aunque la primera vez que se recoge esta historia es en una obra de Don Ramón de la Cruz, "La Petra o la Juana", en 1791.
Emilia Pardo Bazán también la nombra en "La Tribuna".
Todo esto nos hace sospechar que este lance era famoso en todo Madrid... y de ahí ha quedado la famosa expresión de "esta casa parece la de tócame Roque" para aludir a una vivienda llena de trifulcas y discusiones.
Llegamos ya a otro de los puntos fuertes de la visita de hoy, la Iglesia de las Salesas Reales, también conocida como Nuestra Señora de la Visitación o Santa Bárbara.
En este lugar encontramos la llamada "tumba del amor"
DE MI PROPIO BLOG, DE UNA VISITA CON MARISA EN FEBRERO DE 2019:
El monasterio fue fundado por Bárbara de Braganza, la esposa de Fernando VI, hijo de Felipe V, primer monarca de la dinastía Borbón.
En un principio también era colegio y residencia de jóvenes de la nobleza.
En ella están enterrados el rey Fernando VI así como la propia reina fundadora, su esposa Doña Bárbara.
Actualmente, la iglesia acoge la Parroquia de Santa Bárbara y el resto de la construcción es sede del Tribunal Supremo.
Ella lo creó en el 1748 para asegurarse un lugar tranquilo donde pudiera residir en caso de la muerte del rey, ya que su suegra... Isabel de Farnesio, y madrastra de Fernando VI, no la trataba demasiado bien.
Sin embargo, la historia acabó de un modo bastante diferente, ya que ella falleció en primer lugar y el pobre viudo, acabó mal de la cabeza, porque en verdad la quería mucho y no pudo soportar su pérdida. (imagino que tampoco ayudó que sufriese trastornos mentales, claramente hereditarios)
A pesar de los intentos de recuperar al rey, lo cierto es que los últimos meses de reinado fueron desastrosos -se conocen como "el año sin rey"- y aunque se retiró al Castillo de Villaviciosa de Odón, para ver si con el reposo y su afición favorita, la caza se recuperaba, lo cierto es que fue empeorando hasta su fallecimiento.
Le sucede en el año 1759 su medio hermano, Carlos III.
Este matrimonio real fomentó las artes como ningún otro hasta el momento, fueron los promotores del Museo de Bellas artes de San Fernando y fundaron las Sociedades de Amigos del País, entre otros logros.
Además fueron los principales mecenas del cantante castrato Farinelli.
En la portada podemos ver una representación de la Visitación a Ntra Sra. por parte de San Francisco de Sales, que era un sacerdote súper amable y majo en tiempos de la plena contrarreforma y que rebate a los calvinistas pero con buenas palabras y hablándoles para convencer, no batallando... es por ello que siempre ha sido el patrón de los periodistas.
El monasterio se concibió también para acoger a mujeres pudientes retiradas, que solían dedicarse a visitar a los enfermos, entre otras cosas.
Ya en el interior, vemos que se trata de una iglesia real, con materiales nobles como el mármol y se aprecia una tremenda suntuosidad y riqueza en todo el lugar.
Estamos casi en Navidad, y han montado un precioso belén
El Retablo principal representa a las virtudes de la fe y la caridad y a San Francisco de Sales y los dos reyes Santos.
El púlpito, que observamos a la derecha es bastante peculiar, con un "tornavoz" (una especie de cúpula que va sobre el púlpito y permite que la voz del sacerdote se distribuya perfectamente por toda la iglesia) para la época era un invento bastante avanzado puesto que en ese momento no existía ningún sistema similar.
Encontramos en la cabecera de la iglesia, a ambos lados del retablo mayor, los sepulcros de los Reyes Fernando VI a la derecha de nuestra visión y el de O'Donnell, a la izquierda.
El sepulcro de O'Donnell, resulta también magnífico (inserto una fotografía prestada de internet):
Fue duque de Tetuán, militar del siglo XIX, perteneciente a los llamados espadones a favor de Isabel II. Entró triunfante en el pueblo de Tetuán y por eso se le llamó a esta zona Tetuán de las victorias, actualmente es uno de los barrios de Madrid.
Es una obra de Jerónimo Suñol (autor también del monumento a Colón que se encuentra en la misma plaza de Colón) de estilo plateresco.
Al otro lado, el sepulcro del rey Fernando VI.
Obra del gran Francesco Sabatini en colaboración del escultor Francisco Gutiérrez Arribas fue un encargo del rey Carlos III.
Posee gran cantidad de elementos no sacros, como el Ángel que representa la fama, Saturno representando al tiempo, y dos bolas de mundo (España tenía territorios por todas partes) y dos alegorías representando la abundancia y Justicia , cualidades que debe tener un rey.
En el columbario, por la parte de atrás justamente de la tumba de Fernando VI, está el sepulcro de Bárbara de Braganza, que según cuentan era una persona gruesa y no muy agraciada, con marcas de viruela en el rostro, pero tan buena, simpática y genial que su marido y el resto de las personas que la rodeaban, la adoraban.
El sepulcro es mucho más sencillo que el del rey, pero resulta muy impresionante también.
Símbolos de la muerte y el paso del tiempo, como la calavera. Unos angelitos llorando que acompañan a su alma. Y otros que sujetan un retrato de la reina. El autor: Juan León.
En la capilla donde está el columbario, hay un grupo escultórico que representa a la Sagrada Familia.
Y una estatua de la santa a la que está dedicada esta pequeña capilla: Santa Bárbara.
Ya en el exterior de nuevo, tomamos la calle de Fernando VI y llegamos hasta un edificio realmente bonito, es la antigua fábrica de carruajes Lamarca. Se trata de un inmueble modernista del año 1902.
Era un local de artículos y coches de lujo y después un mercado.
Tras la pandemia es un sitio de éxito, con locales caros y lujosos.
Los grandes ventanales que hoy son enormes escaparates eran las puertas por donde entraban los carruajes para su reparación o venta.
imagen de Vanity Fair
Este era su aspecto a primeros del XX:
imagen de edificiosdeMadrid.es
Es una construcción industrial, que ahora se ha transformado en un edificio lleno de pisos de lujo, apartamentos y locales comerciales. Ahora está muy bonito, pero en los 80 estaba muy degradado:
imagen de Urban Idade
Un poco más adelante, el Palacio de Longoria, sede de la SGAE. Se la conoce como casa pastel o tarta.
Es de Grases Riera, arquitecto amigo y colega de Gaudí.
imágenes de otra visita, a otra hora del día.
Y estas otras imágenes son de un día en el que Isabel y yo fuimos a una exposición sobre cine de terror y pudimos ver el interior... Es una pasada, precioso de verdad.
Llegando casi a la calle Hortaleza, tenemos una fachada curiosa, con una fila entera con pingüinos, recordándonos que aquí estaba la antigua fábrica de cervezas de Santander. Realmente hasta el segundo piso era la fábrica, la parte superior la han construido después, y lo cierto, es que no se ve nada mal. (De los pocos añadidos acertados que hemos visto, diría yo).
Los pingüinos llevan un barril y grabada en ellos una cruz blanca (eran belgas)
imagen propia de una visita anterior
en esta fotografía se ve como estaba originalmente, con una sola planta - imagen del COAM
Ya en la confluencia con la calle Hortaleza, en esquina con Mejía Lequerica, tenemos otra fachada con animalitos. Se trata de la Casa de los Lagartos (en realidad son salamandras)
Nos cuenta Javier que es un edificio poco profundo, y que lo más interesante sin duda es la fachada.
imagen de Google Maps - el edificio de los lagartos es solo la parte que se ve más verde
Se trata de un edificio modernista de 1911.
El arquitecto es Benito González del Valle y Fernández-Galán. Casas para alquiler, encargadas por Gabriel Larrea.
vista del edificio - imagen propia
detalle de los lagartos o salamandras - imagen propia
Como parte final de nuestro recorrido de hoy, vamos por la calle Hortaleza, para ver un par de cosillas más.
En la esquina con Santa Brígida tenemos una fuente que se llama "De los Delfines" (era conocida como la fuente de las recogidas o de San Antón)
Anteriormente se llamaba "Fuente de los Galápagos" por los animalitos que la decoraban.
Por eso, de modo testimonial, hay una tortuga en el suelo.
La original es de Ventura Rodríguez, y databa del año 1772, como se ve en la inscripción en latín que tenemos arriba.
A principios del siglo XX, los arroyos se secan y se estropea la fuente durante unas obras.
Se suma la circunstancia de que ya estaba llegando el agua a las casas por las canalizaciones, así que la fuente cae definitivamente en desuso.
Fuente de los Delfines y el recuerdo de la tortuguita en el suelo - imágenes propias
la antigua fuente - imagen de Secretos de Madrid
El Convento de Santa María Magdalena o de las recogidas. Las traían aquí, intentando salvarlas de la mala vida y no podían volver a salir … solo si llegaban a ser monjas o se casaban.
Practicaban a diario lo que se llamaba "Ronda del Pecado Mortal" (que miedito, ¿no?).
A principios del XVIII, la Hermandad de Felipe V, tenía una gran obsesión por acabar con prostitución
Ahora es una de las sedes de la UGT. Así que nada que ver con su uso primigenio.
Por último, entramos en la Iglesia de San Antón. Es uno de los lugares más importantes de la asociación no gubernamental de "Mensajeros de la Paz", fundada por el Padre Ángel en los años 60. (1962)
Está abierta los siete días de la semana las 24 horas para los más necesitados. Recogen alimentos y artículos de primera necesidad que se reparten entre los más pobres, y también donativos de todo tipo.
Además de esto, esta parroquia esa conocida también por una bonita tradición que tiene lugar cada 17 de enero. Este día se hace una misa y una ceremonia para bendecir a todo tipo de animales. Los vecinos acuden con sus mascotas, animales de compañía...y compran panecillos del santo que, según la tradición, duran en perfecto estado hasta el año siguiente (si es que aguantan sin comérselos)
Y es que San Antonio Abad es el patrón de los animales.
Además hay desfile de animales, un mercadillo y participan diversas asociaciones caninas.
Yo nunca he ido, pero parece una fiesta entrañable y divertida.
La iglesia la construye Pedro de Ribera, sobre el 1740, y tenía una de sus maravillosas fachadas, (no he sido capaz de encontrar ninguna imagen ni grabado de la misma).
Lamentablemente, entre los años 1794/1832 se sustituye por la actual, mucho más sobria y en supuesta consonancia con el resto del edificio.
La fachada de Pedro de Ribera se perdió en el siglo XIX cuando se construyó el colegio.
Parece ser que en su fachada tenemos el reloj más antiguo de Madrid.
La nueva fachada que podemos contemplar hoy es de estilo neoclásico, del gusto de la época. Sobre la portada, en una hornacina, se situó una escultura de San Antonio Abad.
fachada principal de San Antón - imagen propia
altar mayor, con la imagen de San Antón y su cerdito
la parte superior de la iglesia - el coro con todas las fotografías y cartelillos y una vidriera de San Antón - imágenes propias
Dentro de la iglesia están las reliquias de San Valentín, el patrón de los enamorados. (Fueron donadas por el papa a Carlos IV)
Aunque nos cuenta Javier que ahora hay una pequeña polémica con este santo... se le ha retirado recientemente la condición de santo... ay madre mía.
reliquias de San Valentín - imagen propia
Hay un maravilloso cuadro, copia de uno de Goya, de la última comunión de San José de Calasanz (1819). El original está en el Prado. Este ha sido realizado con unas novedosas técnicas digitales, que hacen que parezca muy auténtico (está puesto sobre un lienzo y esto contribuye a darle mayor realismo)
Cuadro copia de la última comunión de San José de Calasanz de Goya - imagen propia
Las tallas son todas del siglo XVIII, así que tienen cierto valor, aunque solo sea por la antigüedad de las mismas.
La iglesia se salvó porque fue una checa durante la guerra y no la bombardearon.
Y con estas imágenes del interior de la iglesia nos despedimos de los compis hasta la vuelta de las vacaciones.
¡¡Feliz Navidad, Feliz Año Nuevo, Felices Reyes!!
EDITO:
La entradita la he terminado el 15 de enero, así que ya todas las fiestas han pasado, hemos vuelto ya a la rutina y casi que podemos hablar de ir mañana o pasado a comprar los famosos panecillos de San Antón... mirad si han pasado cosas...
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