jueves, 27 de marzo de 2014

JABÓN ROSA CHILLÓN, COMO EL GRUPO HORTERA DE CUÉNTAME

Hola chicas,
Hace mucho que no pongo nada en este otro blog y eso que hay varias cosas que quisiera enseñaros.
(me he terminado dos blusas y he tuneado otra... la entrada está a falta de fotos...)

Bueno, hoy os quiero contar otra historia.
Sabéis que me encanta hacer jabón... de glicerina y de aceite.

Mi pobre costillo me secunda en mis ideas siempre que le pido ayuda, y esta vez me había traído un agitador de mezclas del trabajo.

Esto es un aparatejo que usan los químicos cuando tienen que darle cien mil vueltas a algo sin tener que estar pendiente y ... sin dejarte los brazos en el intento.

Este cacharro ya lo había probado mi padre en el pueblo, pero con malos resultados, parece ser que le hizo unas aspas de aluminio y se deshicieron en el intento... y luego, aunque le ha puesto unas de madera, no acaba de gustarle... yo creo que es un poco masoca, entre eso y todo el tiempo libre que tiene, entiendo que quiera hacerlo todo manual y artesano.

No las tenía todas conmigo, de todos modos, porque tuvimos que cortar las aspas de madera (en el cubo jabonero de casa no cabían) y además Manu no estaba muy por la labor, porque le estropee un poco la sobremesa del sábado. Pero al final.... tachán! conseguí su desinteresada ayuda.

El aparato hace bastante ruido y el sábado fue un día realmente frío en Madrid, con lo cual no me apetecía nada tenerlo en la terraza del comedor con la puerta abierta y haciendo ruido, fastidiando la pelí-siesta de después de comer.
Así que la instalamos en la cocina, con la puerta de la terraza pequeña abierta de par en par, para que los vapores no se quedaran flotando en el ambiente.

No tengo fotos del proceso, y mira que lo siento, me gustaría que vierais el asunto, mi padre le ha hecho un soporte de madera, que se encaja en la parte de arriba del cubo y la máquina parece una taladradora vieja (muy vieja...)

En fin, que después de la mezcla de la sosa y el agua y dejarlo enfriar durante la comida, echo el aceite y la dejamos dando vueltas y más vueltas (dos horitas de run-run) y vigilando de vez en cuando (mira que si se estropea la mezcla... ¡¡qué son 2 kg de aceite usado...!!)

Al final, veo con alegría que ha alcanzado el famoso "punto de traza" y le añado esencia de verbena y colorante rosa... por aquello de alegrar un poco el tema.

Este es el momento que quería compartir... que me he pasado un huevo y medio y le he echado demasiado colorante. Bueno, eso es lo que intuyo, aunque la bomba final viene al día siguiente, cuando veo la bandejita teñida de un fosforescente rosa fucsia.

Ayer lo corté y este es el resultado:




No, si ya me han dicho que precioso es un rato.... pero digo yo: ¿lavará la ropa o la teñirá de rosa?

ya lo he consultado a la página donde compré el colorante... mmmm estoy a la espera de su respuesta, ya os contaré...

Si alguien quiere experimentar y no le da miedo, será obsequiado con un trozo de tan peculiar jabón.




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