Un sueño.
Eso era para mi ir a Praga... hace ya mucho que me apetecía conocer esta ciudad y por fin este verano he cumplido ese deseo.
Me costó un poco convencer a las chicas, para que nos vamos a engañar.
Tuve que escuchar frases del tipo: "con la de ciudades que hay para conocer... y nos vamos a Praga que no lo conoce nadie"...cosas de la adolescencia, parece ser que lo guay es ir a sitios más típicos y conocidos...Londres, Roma, París...
Adelanto desde ahora que finalmente la experiencia ha sido todo un éxito y la ciudad superó las expectativas...jajaja
DÍA 1 - 10 agosto:
El día de nuestra partida estábamos feliiiices
Después de un retraso de media hora y de un viaje de tres horas coñazas, al fin llegamos a nuestro destino.
El tipo que nos recoge en el aeropuerto (contraté los traslados para despreocuparnos) parecía salido de la peli de El Padrino o de Promesas del Este (¿la habéis visto?) en plan ganster elegante y tal... muy sequillo pero amable, muuuy atractivo y con una música en el coche que nos pareció de lo más sugerente y "cool" vaya, que nuestro primer contacto con Praga resulta de lo más interesante, jejeje
Llegamos al hotel, el Suite Home, que está muy cerca de la plaza de Wenceslao, y por consiguiente del centro mas céntrico y ... nos encanta.
Las comparaciones, como todo el mundo sabe son odiosísimas, y claro, resulta inevitable echar la vista atrás y recordar el minicuarto de Londres. Nuestra habitación es más un apartamento que otra cosa, con una habitación independiente, un "peaso" de salón-comedor-cocina-dormitorio2 y un baño y una entrada chulísimos. Vamos, que estaremos en la gloria aquí, me da que si.
Nuestra habitación
Bastante cómoda
El salón - dormitorio 2 - cocina
Vista desde la habitación (uauuu es el Sheraton...)
La tele desde donde seguíamos los J.J.O.O.
Como ya es tardísimo, vamos a buscar cualquier sitio abierto y cercano, para cenar algo y acostarnos pronto, que al día siguiente teníamos la visita guiada.
Encontramos, como no, un Mc Donalds, y allá que vamos... sorpresa agradable de nuevo.. por el mismo menú que solemos tomar en Madrid, pagamos unos cuantos euros menos... mira tu qué bien. Nos sorprende, eso si, que el ketchup y demás se pagan aparte y que para entrar al baño, también hay que soltar monedita (pues no nos queda na...)
En los días siguientes, nos enteramos de que este tipo de establecimientos no tienen por aquí mucha aceptación (bueno, entre la gente más joven, si)
DÍA 2 - 11 de agosto:
Después de un reparador sueño (las camas son ultra cómodas) y de un espectacular desayuno buffet, nos ponemos en marcha hacia el centro, lugar de encuentro para hacer nuestra excursión.
En la calle que nos lleva hacia la plaza de Wenceslao (la del burger de nuestra cena) encontramos ya edificios tan bonitos como estos:
Esto es un Casino, creo que es un edificio modernista (la puerta de noche)
A medida que nos aproximamos a la plaza, la expectación aumenta y por fin:
El famoso reloooooj astronómico.
Con una historia truculenta a sus espaldas, parece ser que a su constructor le arrancaron los ojos para que no hiciera ninguno más en su vida... envidiosillos y mala gente que eran.
Y él, en venganza lo paró con sus propias manos, con tan mala pata que se enganchó el brazo en el mecanismo, se paró todo el mecanismo y murió desangrado... un trauma de historia, vamos.
Es súper original, tiene varios relojes y/o calendarios, unos dentro de otros, incluyendo un reloj con los signos del zodiaco y otro con dibujos que representan los meses y las labores que se realizan en ellos (sembrar, recolectar...) y en el círculo exterior, el santoral completo, que la aguja va moviéndose muuuuy lentamente, pasando de un día a otro (este no se puede apreciar en mis fotos, lo siento)
A las horas en punto (creo que 10:00 a 21:00) salen los apóstoles detrás de unas ventanas azules con vidrieras que se abren. Al mismo tiempo, hay cuatro figuras que se mueven, tres que representan los pecados de la avaricia, el narcisismo y otro más que no recuerdo y que niegan con la cabeza al mismo tiempo que suenan las campanitas... y una cuarta figura, un esqueleto, que mueve afirmando... y que indica que queda una hora menos de vida... un dechado de optimismo y buen rollo, como podéis ver. Parece ser que a los praguenses de la época, que no sabían leer, les resultaba de lo más moralizante.. ¿por qué sería?
Te das cuenta de que el espectáculo ha terminado porque acaba con el "canto" de un gallo dorado, que también era todo un adelanto a su tiempo, nada más y nada menos que una especie de robot o animatronic. (por cierto, la palabra robot, es checa... ahí se aprecia ya la obsesión tecnológica)
Es en si mismo una preciosidad (en esta foto se ven un poquiiiito los nombres del santoral - situados donde apunta la flecha del ángel)
De las ventanitas salen los apóstoles y el gallo - dorado, como todo aquí en Praga- se ve arriba del todo
Así se ponen los alrededores cada vez que va a ser el evento.
Nos moló tanto que cada vez que pasamos por la plaza y eran "o'clock" nos quedábamos a verlo
Os dejo un enlace que he sacado de Youtube, por si tenéis curiosidad (en funcionamiento a partir del minuto 1:53) aunque no suena el gallo y sin embargo tocan unas trompetas arriba del todo en la torre que nosotros no vimos en ninguna de las tres ocasiones:
https://youtu.be/_SVqBmNgY5c
La plaza es una pasada, lo más bonito de todo, para mi gusto
Iglesia de Ntra. Stra de Tyn (una maravilla, y se puede entrar dentro...gratis a través de los soportarles que se ven está la entrada)
Nos encaminamos hacia la excursión de Sandemans (altamente recomendable)
Otra zona de la plaza, con el reloj detrás (ellos estarían mirando a la Iglesia de Tyn)
Esta es la estatua de Jan Hus (reformador y predicador que fue unos de los precursores de la Reforma Protestante, al estilo de Lutero, pero en Praga, una historia muy interesante)
Se veían todo el tiempo cochazos de este tipo, que por el "módico precio" de 80 € daban una especie de tour por la ciudad...
Este es el grupo que se formó, casi todos sudamericanos y unos poquitos españoles... en primera fila, cerca del guía, los Rus Simón diciendo "patata"
Este es el guía de Sandemans, un tal Xuban Nafarrate, vitoriano, historiador, y una de las personas más inspiradoras que he conocido en mi vida.
Nos llevó por la zona vieja, Wenceslao, Barrio Judío y nos contó mil historias... verídico, mil o tres mil ...jaja
En una de las galerías o minicentros comerciales que horadan la ciudad. Modernismo a tope.
Vista de la plaza de Wenceslao, lugar de reunión, de protesta, de compras, uno de los puntos centrales de esta ciudad. Al fondo se ve en obras el Museo Nacional, una preciosa construcción neorrenacentista que lamentablemente, se les está hundiendo y lleva unos cuantos años en obras, decidiendo qué hacer, si intentar salvarlo o construirlo de nuevo.

Aquí murieron dos estudiantes durante las revueltas del año 1969, algo que sucedió al año del famoso mayo 68 francés. Hoy se les venera como casi unos héroes. Precisamente, en los días que estuvimos se celebraba algo así como el aniversario y proyectaban películas documentales en una pantallaza enorme y había expuestos varios carros de combate o tanques. Muy impresionante todo, y es que los checos han llevado una existencia de invasión tras invasión, los alemanes durante la segunda guerra mundial y los rusos en la época de la guerra fría y años siguientes son solo dos ejemplos, y es que Praga, está en el centro de centroeuropa, un lugar privilegiado a tope, pero que les ha traído también mucha amargura.
La última invasión, la de los turistas, no es tan sangrienta ni tan violenta como todas las anteriores, pero a mi modo de ver, también hace daño a una ciudad que se ve sobrepasada en verano.
Parece ser que los checos mayores son muy desconfiados y secos, y el guía nos contaba que puede ser en parte debido a esta historia de aspiración a independencia que tienen.
Llevan solo unos 25 años de liberación...
Los jóvenes nada tienen que ver, yo creo que son como en todas partes y muucho más abiertos y simpáticos que sus mayores.
Bueno, seguimos, que me pierdo...jaja
Después, seguimos por la Calle París, que sale de la misma plaza vieja y termina conectando con el Barrio Judío.
Es la típica calle al estilo de Serrano, llena de tiendas de marca ultracaras. Los edificios siguen siendo tan preciosos o más que en otras zonas.
Aquí se ve uno de las sinagogas del barrio, y se aprecian en el reloj las dos esferas, en números romanos y hebreos. Está al lado de una sinagoga.
Esta es la tapia del famoso cementerio, no se ve muy bien en esta toma, pero tiene varios metros de altura, y es que están enterradas cerca de 100.000 almas en este "pequeño" espacio.
Y tiene su explicación... parece ser que los enterramientos judíos tienen sus ritos y prescripciones, y el cuerpo debe ser enterrado en directo y estrecho contacto con el suelo (con un sudario, eso sin, o sea sin ataúdes ni cajas ni nada parecido..) y en una posición y postura determinados.. así, apiladitos, pues caben unos cuantos.
Al lado del cementerio, la casa de pómpas fúnebres.
Y finalmente, llegamos hasta el "Rodolfinum" que se llama de este modo tan singular en honor a Rodolfo de Habsburgo, y que es la sede de la Orquesta Filarmónica Checa.
Como curiosidad, nos contó nuestro amigo Xuban que en la época nazi, el edificio fue atacado (como toda la cultura en general) y que a uno de los cercanos a Hitler -no recuerdo si el mismísimo Goebbels- le encargaron que quitase una de las estatuas que coronan el edificio...adivinar cual le ordenaron quitar es fácil (la del músico judío, of course, que no recuerdo si era Mendelssohn, o Mahler...)
Arriba hay varias estatuas de compositores famosos, como Bach, Mozart, Haydn...
El zopenco-nazi se equivocó y arrancó de cuajo la estatua de Wagner, confundiendo a unos con otros.. y este compositor es precisamente el favorito del Tercer Reich...
El que casi acaba defenestrado es él..jajaja, hay que andarse con ojo, parece ser que aquí en Praga eso de la defenestración (arrojar a alguien por una ventana con el objetivo de matarlo) es una costumbre ancestral.
Son muy famosas las del siglo XV, protagonizadas por los husitas (los de la religión creada por J. Hus) y las del XVI, que acabaron por ser el detonante de la famosa guerra de los Treinta Años...
No todo iba a ser dar vueltas y cultura, que está muy bien, eh?, pero el guía nos conduce a hacer un receso (y por qué no, a intentar conseguir que nos apuntemos a otras excursiones) a un bar en el que deben tener un pequeño acuerdo.
Así que le damos nuestra propinilla (César me recomendó 5 € por persona) y ...
Probamos nuestra primera "pivo" o sease, cerveza checa... suave, fresquita y ... barata!! el medio litro, poco más de 1,50 € en casi todos los sitios.
Como hemos tenido una experiencia más que buena con Sandemans, decidimos hacer el Tour del Castillo de por la tarde, y como Xuban solo puede hoy... pues decidimos que hoy...¡¡palizón pal cuerpo!!
Comemos guarramente en un KFC (aún no nos atrevemos a entrar en sitios praguenses y tenemos exactamente 3/4 hora para buscar un sitio, comer y volver al Rodolfinum, que es de donde sale la excursión de la tarde.
Empezamos la visita al castillo, después de un corto, pero intenso trayecto en el tranvía 22, el más turístico de toda la ciudad, y es que va por toooodo el centro y además es el único que sube al castillo. (nos enteramos después que pasa bastante cerca de nuestro hotel)
Al castillo se accede por una entrada vigilada por policías, que revisan las mochilas y pasan un palo o bastón por el cuerpo a la gente (los super frikis de Harry Potter recordarán las "varitas de virtud" que tanto nombran en los libros.. yo me las imagino así)
Además, como están muy cerca los atentados de Niza y tiene una entrada paralela para coches, han puesto una especie de barricada enorme que la verdad, te da un poco de mal rollo.
Buenooooo, accedemos al recinto:
Hay que decir que nosotros no sacamos entradas ni esta vez, ni la que volvimos solos (teníamos una mañana libre y decidimos explorar a fondo todo, más a nuestra bola)
Y es que ya los jardines y la Catedral de San Vito por si solos merecen la pena, y son de libre acceso.
(por cierto, si alguien asocia a este santo con el famoso "baile de san Vito" tiene toda la razón del mundo, parece ser que este buen hombre sufría una patología que le hacía imposible parar las piernas y las movía continuamente)
El castillo empezó a construirse allá por el siglo IX (hay algunos restos antiguos que se pueden visitar) pero su máximo esplendor es de época posterior.
Es el castillo más grande del mundo, por extensión y alberga multitud de edificios. (70.000 m2 !!)
En los jardines nos cuenta que había invernaderos enormes para cultivar naranjas, ya que tener esta fruta en tu mesa era un claro signo de distinción y riqueza allá por el gótico.
En este pabellón, que es El Salón de la Pelota" hay un "gazapo" de la era del comunismo, y es que una de las figuras, que representan a las musas, tiene entre sus brazos la hoz y el martillo...obra de un restaurador inspirado esto como curiosidad, nada más.
Unas fotos de la maravillosa catedral:
Otra curiosidad, como la Catedral se empezó a construir en el gótico (aunque aún no está acabada), se pueden ver figuras como esta que está abajo del todo: la cabeza de un indio, tipo "Apache" o "Siux" que imagino despertó la curiosidad de uno de los escultores y decidió ponerla.
El interior y las vidrieras (la segunda es la famosa de Alfons Mucha)
Las vidrieras y el rosetón son de los años 30, osea que bastante modernas, pero están tan bien integradas que da gusto.
Me gustó especialmente la de Mucha, aunque desmejora bastante que se vea con letras claras y precisas el nombre del patrocinador: "Banca Slavie"
Me tomo la libertad de poner una foto que no es mía, para que apreciéis bien el trabajo tan bonito de dicha vidriera (la segunda foto, la más detallada)
Está la imagen de San Juan Nepomuceno, patrón de Praga en forma de platerías variadas de más de mil kilitos...
Esta es una de las vidrieras, pero no es la de Mucha, diseñada también por Max Svabinsky y ejecutada por Jan Jares entre 1933 y 1934.
Esta es la de Mucha La leyenda de San Cirilo y San Metodio, diseñada por Alfons Mucha.(la segunda foto es la que os digo que no es mía)
Salimos de nuevo al exterior y rodeamos la Catedral, llegando a una inmensa plaza que tiene, además de la catedral, la sede de la presidencia checa... y el gran Xuban nos contó otra anécdota que, aunque es muy divertida, a los checos no les hace mucha gracia, por la vergüenza que les ocasiona:
Allá por el año 2011, el presidente checo, Václav Klaus, se encontraba de visita en Chile, y en una rueda de prensa que estaban dando, se ve perfectamente cómo se guarda una pluma que había en una cajita, y que no vuelve a sacar sobre la mesa... (el vídeo, que se hizo viral está en internet... no hay má que buscar "presidente checo roba boli..." y salen varios.
Los checos, enfadados hicieron una especie de protesta bastante singular... muchos ciudadanos se acercaron a esta sede presidencial con un bolígrafo "Bic" en la mano, gritando consignas, y llamándole de todo y los amontonaron en la puerta... como diciendo que les proporcionaban bolígrafos, que no los mangara por ahí.
Él se defendió como pudo, y alegó que fue un despiste y que no era su intención quedárselo, y que la oposición había aprovechado el descuido para hacerle luz de gas... ahí quedó el tema.
Uno de los lugares más famosos del complejo del Castillo de Praga es el Callejón del Oro, una callecita estrecha y llena de casitas tipo Hobbit, de colores y bastante antiguas a la par que reformadas.
Se llama así por la supuesta relación con la alquimia (vivían concentrados por la zona, buscando frenéticamente la piedra filosofal... o eso cuenta la leyenda...)
La más fotografiada, esta azul, donde vivió Frank Kafka y que ahora es una librería.
Imposible sacarlas sin gente.
También hay tiendas de juguetes y marionetas, otra de las grandes aficiones de los praguenses:
Y al hilo de esto de las marionetas, justo al lado, el museo del juguete.
No entramos, claro, pero parece ser que tienen una colección de Barbies digna de mención... por los frikis lo digo, que los habrá.
En la entrada, este sugerente cartel:
Para finalizar, unas preciosas vistas, antes de bajar de las alturas...
Aunque parece que no hay nadie, tuvimos que esperar nuestros buenos minutos para conseguirlas (todo a tope) mis chicas se tronchaban con unas japonesas que se hicieron mil y una fotos en la misma almena, cambiando un par de milímetros de postura... y haciendo corazones con sus manos todo el tiempo... unas cansinas las japos.
Las que pongo a continuación son desde el famoso puente de Karlos, y claro, hicimos lo típico, por ejemplo escuchar las historias de San Juan Nepomuceno, santo pattrón de Bohemia, que fue arrojado al río (qué obsesión por tirar a la gente Dios mío) porque no le quiso contar al rey Wencesceslao los secretos de confesión de su esposa -la del rey- jeje
Cuenta la leyenda que el río le trajo de vuelta y no murió.
Así que la otra cosa que hay que hacer es tocar la figurita de este santo siendo arrojado, si es que quieres volver a Praga... si hay dudas sobre lo que hay que tocar, es la parte que más brilla...ajajaja
La última cosa que hay que hacer es pasear relajadamente (lo que te deje el gentío) y mirar las artesanías, dibujantes, músicos y demás que ofrece este espacio maravilloso.
Vuelta agotadora al hotel.
DÍA 3 - 12 agosto:
Empezamos de mañanita y partimos a explorar un poco más el barrio judío, la casa del Ayuntamiento etc.
En cuanto andamos un rato nos queda claro porqué a Praga le llaman la ciudad de las mil torres.
Esta vez encontramos una así , en mitad de la calle. Pero lo que buscábamos era la Torre de la Pólvora y la Casa Municipal.
Buscando una estación de tren que nos había dicho Isabel que era muy bonita, entramos en esta, que resulta que no es la famosa, pero que tampoco está tan mal... (pero es que hay algo feo aquí, Dios mío?)
Ahora si que si, encontramos la torre de la pólvora!!
Y justo al lado, la Casa Municipal
La casa municipal tiene mucho para ver, vidrieras y esculturas modernistas, es un lugar de conciertos... reuniones, tiene una cafetería espectacular, por lo visto...preciosa
Estas dos fotos son de un mercadillo que estaba todos los días, y como nos pillaba del hotel - plaza vieja, plaza vieja - hotel, lo visitamos unas cuantas veces.
Creo que está cerca de la iglesia de S. Havel, por el plano...
Un sitio fantástico donde compramos todos los recuerditos. Las palabras que me vienen a la mente son limas, sudaderas y marionetas... que es lo que más miramos, jajaja
Este bicho tan feo es un topo y se llama Krtek, y no paramos hasta descubrir la historia, ya que está por todas partes, en llaveros, peluches, ilustraciones varias...parece ser que es un personaje muy famoso en Praga (y en otros países del Este o Alemania) al estilo de Mickey Mouse en las américas.
Y fue creado en los 50, que es lo que me parece más fuerte...
No resistieron hacerse una foto con él.
Justo al lado del mercadillo, otro puesto de los rollitos de canela que se ven por todas partes....mmm deliciosos, se llaman trdelnik...impronunciable, verdad? pero más que ricos.
Hacemos una pasada de nuevo por el Barrio Judío y conseguimos vislumbrar las lápidas por una ranura hecha ex-profeso en una puerta lateral, justo al otro lado del sitio donde se apelotona la gente.
Me encanta la paz que se respira en el sitio.
Volvemos a Tyn, a una zona que viene desde el barrio judío que se llama "el pasaje" y comemos por allí, en un sitio que parece italiano, pero que tienen también comida praguense.
Extraordinario guiso de carne servida dentro de ...un pan
Es el famoso Goulash, que aunque en realidad es un plato húngaro, se come por toda esta zona:
San Nicolás, de la plaza nueva (Stare Mesto)
Otro sitio más donde vemos que ofertan escuchar música clásica por unos precios asequibles.
Me juro a mi misma que volveré a Praga y estaré en los conciertos que no he podido estar ahora.
Es muy bonita, pero no tiene nada que ver con la otra iglesia de San Nicolás, la de Mala Strana, que está al otro lado del puente, muy muy cerca del castillo y que veremos otro día.
Así las cosas, decidimos relajarnos y volver a pasar por los sitios que nos llevo Xuban en volandas, el puente:
El sitio hortera donde los novios se hacen fotos pero que no nos extraña por qué:
Los meones del Museo de Kafka, obra de David Cerny, eternamente haciéndose pis sobre un mapa de la República Checa:
La calle más estrecha de Praga...
Resulta que sólo es un reclamo para turistas, que hicieron la separación entre fincas de forma artificial, y que al otro lado lo que hay es ... ¡un restaurante!
Claro que a pesar de eso, lo típico es hacerse la foto, y como soy amante de las cosas que se pueden hacer gratis en las ciudades...pues eso:
La Isla Kampa, sus románticos puentes y canales y la mini Venecia:
Este es el único molino que queda aún en pie, en la zona había muchos, pero solo este ha resistido al paso del tiempo.
Sin olvidar, por supuesto, el famoso muro de Lennon, llamado así por el Beatle asesinado.
Es un sitio muy emblemático cuyo significado para los ciudadans es libertad.
Empezaron a hacer grafittis durante la ocupación soviética, y aunque todas las noches el muro era repintado, una y otra vez por las mañanas, se volvía a llenar de consignas durante las noches, así que se ha convertido en un símbolo de la protesta ciudadana.
Hoy es un espacio muy visitado, y a todas horas hay gente.
Incluso hay varias personas muy avispadas que se colocan con pintura y pinceles y por la voluntad, puedes plasmar tu frase.
Las chicas flipaban, sobre todo Paula, que está en esa época tan bonita de la adolescencia trágica y romántica, llena de ideales y de utopía... mmm qué tiempos aquellos, ¿no?
Un poco más adelante, las estatuas de los bebotes sin cara, obra de David Cerny, un controvertido escultor checo, cuyas obras se encuentran por todas partes en esta ciudad, por ejemplo los meones del museo de Kafka, también son obra suya (me quede con ganas de ver alguna más)
Estos bebés son iguales a los que están trepando por la Antena de Televisión gigante, que está en otra zona de la ciudad, y que visitaremos mañana. Por el tamaño que tienen, da una idea de cómo será la famosa antena, que se ve desde muchos lugares de la ciudad.
Finalizamos la tarde visitando uno de los lugares verdes, del que había oído hablar mucho y que nos encantó, el parque de Petrín, en Mala Strana.
Subimos, por un módico precio (27 ck, o sea, 1 €) en un funicular hasta arriba del todo, prácticamente a los pies de la Torre.
Esta torre se edificó en el 1891 y se la ha comparado mucho con la Torre Eiffel, pero, que me perdonen, a mi me parece que no le llega ni de lejos. Y eso que el lugar es mágico y tiene unas vistas de morirse.
Se construyó con motivo de la Exposición Nacional de Praga, dos años después de la de París. Se usaba como torre de observación y también como torre de transmisión y es un lugar muy visitado.
Bastantes coronas y muchos escalones después (dicen que 229) podemos disfrutar de unas vistas maravillosas de toda la ciudad (la torre tiene 60 m. de altura)
Y es que parece ser que estamos a 200 m sobre el río Moldava.
Se ven el palacio y la Catedral de San Vito
Y aquí perfectamente el puente de Carlos y la iglesia de
Sencillamente maravilloso.
Incluida en la visita, el Laberinto de Espejos.
Pertenecía a la Exposición del Club de Turistas Checos. Y que en cierto modo también formaba parte de la Exposición Universal.
Después de perdernos un rato en el laberinto propiamente dicho, acabamos en la Sala de la Risa, que es simplemente una habitación llena de espejos cóncavos y convexos que nos hacen retroceder a nuestra infancia.
Todo esto me suena a algo que había en el Parque de Atracciones de Madrid allá por los 70 y 80...
¿a alguien más le suena?
Bastante divertido, la verdad.
Finalmente bajamos por el otro lado del monte, que es un sitio muy verde y que nos encanta. A mi particularmente me fascina que estemos al lado de la ciudad y tengamos este bosque y estos campos al alcance de nuestras manos, (incluso árboles frutales... )
y lo que es más curioso, muuuuy poca gente
En esta foto se ve perfectamente la famosa Antena de los bebés trepadores, vamos mañana.
Acabamos en Mala Strana, tomando algo en una terracita, justo al lado de San Nicolás, que ya ha cerrado sus puertas (otro día será)
Volvemos al hotel por el Puente de Karlos (no lo vais a creer pero volvimos a ver el espectáculo show del relojito... son las 20:00 y como cuadraba ...(pero ya no pongo más fotos, que soy una cansina)
Tranvías antiguos en San Wenceslao.
También hay muy cerca una galería con unos cines, en la que había esta preciosa vidriera.
Nos tomamos aquí cerca unas pizzas por el modiquísimo precio de 40 kc... un poco más de un euro... y llegamos cenados al hotel, para tomar un poco de fruta y una infusión.
DÍA 4 - 13 agosto:
Hoy vamos a ir por una zona un poco más nueva de la ciudad, la idea es ir a ver el Museo de Mucha, la estación preciosa de tren y llegar cerca de la Nueva Antena de Televisión, que nos dijo Xuban que se podía comer bien y barato.
Empezamos con un premio.
Me asomo a una de esas galerías cubiertas que hay por todos los lados y ¿qué me encuentro? otra estatua de Cerny: San Wenceslao sobre su caballo muerto.
Me encanta, la había visto en las guías y tenía mucha curiosidad por verla.
Está en el pasaje de Lucerna, muy cerca de la plaza de Wenceslao
Toda la galería está en obras, pero me las apaño para que en la foto no salga ni una de esas malditas redes verdes.
Im-presionante.
Hacemos una visita al museo de Alfons Mucha, disfrutando de sus preciosos dibujos, proyectos y grabados y aprendiendo mucho sobre su vida, ya que está muy bien montado.
Yo salgo flotando en una nubecilla, este es uno de mis artistas favoritos y conocer sus obras tan cerca para mi ha supuesto una experiencia muy grata.
Encontramos finalmente la perdida estación de tren, una vez sobrepasado el Museo Nacional y realmente es una preciosidad, la cúpula y algunas de las puertas sobre todo.
Dando un largo y relajado paseo, llegamos a un parque alucinante (el Riogrovy) que está lleno de gente paseando y disfrutando de la mañana del sábado:
Y justo al otro lado del parque, unas casas "estilo Secesión" preciosas, de principios del siglo XX
Y como dominando toda la zona, la antena moderna.
Hay bastante controversia con la dichosa torre, pero a mi no me pareció tan fea.
Es un poco triste el barrio que está justo a sus pies, pero ganamos en que es mucho menos turístico y podemos disfrutar de una visita mucho más interesante y fuera de lo común. (y libres del gentío, que se agradece por un día)
Aquí en esta foto se aprecian justo los bebés trepadores de Cerny y su enorme tamaño;
Disfrutamos mucho de esta comida, en una terraza, con sus consabidas cervecitas suaves.
Algunas de las exquisiteces: sopa de ajo, estofados variados y una especie de pollo empanado con una masa de patata.. todo muy rico y diferente
Bajamos otra vez para el centro, buscando más modernismo:
y las famosas casas cubistas:
Y terminamos descansando tirados en un parque de una de las fantásticas islas que forma el río Moldava.
Es increíble como el río forma parte de la ciudad, como está tan integrado en todo el paisaje y se percibe lo importante que es para los praguenses.
En realidad, tal y como me contó mi amiga Marta, por todas las capitales europeas pasa un río navegable, excepto Madrid, ya que la capital era Toledo, por donde si pasa el Tajo.
Finalmente y ya de camino al hotel, y más muertos que vivos, la verdad, seguimos el río para buscar las "Casas danzantes", que también llaman Ginger & Fred, como los bailarines, y que ya vimos en nuestra primera noche cuando nos trajo "el padrino" desde el aeropuerto.
Esta zona, como no, también tiene su maravilloso encanto.
Son alucinantes, tienen un movimiento hipnótico que hace que no les quites la vista de encima... desde luego, nos encantaron.
Por la noche, decidimos bajar al Museo del Sexo, que está relativamente cerca del hotel y que nos llama por la curiosidad...
Por supuesto las chicas se quedan en la habitación (otras dos noches bajamos también a una especie de pub que está enfrente a tomarnos unas pivos...jeje)
El museo está bien, muestra todo tipo de objetos y artilugios, algunos bastante antiguos, que nos recuerdan que este tema le ha interesado siempre a la humanidad.
Lo más curioso y que a mi me hizo bastante gracia, era una casita de muñecas con figurillas haciendo guarrerías (que incluso se movían) estaba en un prostíbulo para que la vieran los clientes.
Parece ser que eran muy habituales a principios del siglo XX.
También había un minicine en el que proyectaban dos cortos eróticos de los años 20.
Y cuento esto, porque nos quedamos alucinados... ¡¡resulta que eran dos películas españolas!!
Recuperadas de la Filmoteca de Valencia, leí en los créditos.
Nosotros siempre a la cabeza de todo...
Para finalizar, Manu se cenó un espectacular "perrito caliente" checo, bastante sabroso y algo picante, y bastante barato... llevaba un par de días diciendo que lo quería probar.
Yo, para no dar mucho por saco a mi estómago, me tomé un sandwich al llegar de nuevo al hotel.
DÍA 5 - 14 agosto:
Es nuestro último día en Praga y decidimos volver a visitar la zona del Castillo un poco más tranquilos, para estar moneando y hacer fotos.
Tomamos el tranvía 22 y allá que nos vamos
El salón de la pelota...
Esta es una de las torres del castillo (a sus pies, se encuentra el foso de los Ciervos)
Por fin nos hacemos unas fotos como Dios manda, tranquilamente y con la catedral al fondo.
Vemos detenidamente el foso de los ciervos... llamado así porque el rey Rodolfo sufría de gota, y cuando no podía salir a cazar, que era su entretenimiento favorito, le soltaban todo tipo de bichos, para que los "cazara" con su arco y sus flechitas desde la torre...
Parece un bosque, en verdad, pero realmente está justo al lado mismo de la entrada al castillo (ver la foto de más arriba)
Nos arriesgamos a intentar ver el cambio de guardia, ya que son casi casi las 12:00 y nos había contado Xuban que era... cuando menos peculiar.
Sabemos que está próxima la hora y que estamos en el sitio correcto por la ingente cantidad de personas que se empiezan a congregar.
Esta zona es preciosa también con unos edificios soberbios (ojo, estamos fuera del recinto del castillo)
Tenemos suerte, ya que los militares empiezan a formar un pasillo justo delante mismo de nuestras narices... eso quiere decir que lo vamos a ver todo en primera fila
¡¡Y así es!!
Jo, siempre me han gustado mucho los hombres con uniforme...¿le ocurre a alguien más?
Volvemos a entrar al recinto y vemos la cola colisima para ver la catedral por dentro... ¡como nos alegramos de haber entrado el otro día con el grupo!
Así que nos dedicamos simplemente a disfrutar de las vistas
El callejón del Oro no lo podemos visitar de nuevo ... nos enteramos que es gratuito a partir de las 17:00 , ahora hay que pagar la entrada.
Así pues nos ponemos en marcha para bajar otra vez hacia Mala Strana, pero por otro sitio distinto, la Calle Nerudova, una de las más bonitas de la ciudad. Se llama así en honor al escritor checo Jan Neruda, que vivió aquí y sus relatos están en gran parte inspirados en esta zona de la ciudad.
Antes unas preciosas vistas desde el mirador, ¡¡se ve la Torre Petrín!!
Finalmente, visitamos Paula y yo la iglesia de San Nicolás... que yo me había empeñado en entrar desde el principio. Ya en la plaza de Mala Strana
Es chula, una ostentosidad barroca, pero muy bonita
La foto que sigue nos la hicieron unos valencianos súper majos que conocimos y con los que estuvimos charlando diez minutos. Nos contaban sus experiencias y nosotras las nuestras...más majos
Me sentí como en un programa de esos de "Españoles por el mundo" jua jua
Esta es la plaza principal de Mala Strana, otra preciosidad más, centro de esta parte de la ciudad, que fue fundado en el siglo XIII.
Mala Strana significa "ciudad pequeña" y al contrario que la ciudad vieja, (Stare Mesto), mucho más burguesa y medieval, aquí hay bastantes palacios barrocos de influencia italiana.
También está la iglesia donde se venera al famoso "Niño Jesús de Praga" con lo cual todos los escaparates tienen imágenes del mismo.
Después de comer (esta vez unas pizzas y quebabs, no nos complicamos la vida, porque no vemos ningún sitio atrayente de verdad) volvemos a Kampa.
Están rodando una especie de anuncio unos japos... que lo deben flipar bastante en esta ciudad.
Como hago unas cuantas fotos... su fotógrafo me sigue el rollo así... nos reímos bastante!!
Damos un paseito más por una de nuestras zonas favoritas:
Si, lo habéis adivinado... otra vez el muro de Lennon
Finalmente, vuelta algo tristona al hotel
(esta preciosa portada está justo al lado y no la había puesto todavía)
Mis hijas tenían bastante cachondeo con este gnomo, parece ser que anunciaba una guardería... pero daba un miedito que para qué...
La torre es del Ayuntamiento de la Ciudad Nueva, y es justo la esquina anterior al hotel... era ver esto y saber que estábamos llegando "a casa"
Es nuestra última noche, así que salimos a cenar, y disfrutamos de una velada algo extraña... estupenda porque el sitio era muy chulo, una terraza con música en directo pero angustiosa porque algo de lo que cenamos le produjo a Paula un malestar por su alergia y nos asustamos un poco...
Se quedó en un susto, pero también en un aviso para ella... nunca pruebes a lo loco sin ton ni son de todos los platos a la vez. porque no identificarás lo que te ha dado la alergia...
Para relajarnos y quitarnos el susto, visitamos por última vez el reloj, ya que estamos a dos pasos
Y así, de esta forma tan bella, nos despedimos de Praga
Último día, vuelta a casa - 15 agosto:
Ya solo me quedan fuerzas para poner estas tristes imágenes del aeropuerto... y de nuestra espera, ya que el vuelo salió casi con hora y media de retraso...
un poco rollito, la verdad.
Hasta la próxima... ya veremos cuando volvemos a hacer un viaje de este tipo... ojalá sea en breve
Besitos