martes, 23 de febrero de 2021

TALLER CONOCER MADRID 3 - EL MADRID DE LOS BORBONES - EL PASEO DEL PRADO - 10 DE FEBRERO 2021

¿No es bonita?
La escultura de "Julia"de Jaume Plensa.
Se suponía que era temporal, pero parece ser que va a estar algo más de tiempo entre nosotros. Y menos mal, porque a mí, particularmente, me encanta.

Y me encanta la idea del autor de que cada madrileño puede interpretarla como quiera y de lo cambiante que resulta según el momento del día o la climatología.
En esta tarde tan soleada, resulta blanca nuclear. Y eso que nos dice Marisa que cuando está nublado, contrasta aun más.

imagen propia

imagen propia

imagen propia 


El periodo borbónico va de Felipe a Felipe. (y tiro por que me toca...)
Comienza con Felipe V, pasando por Luis I, Fernando VI, Carlos III, Carlos IV, Fernando VII, Isabel II... (luego saltamos con Amadeo I, República, guerra civil y Franco...) y finalmente, dinastía borbónica de nuevo con Juan Carlos I y otro Felipe, el VI. 
¿Llegaremos a ver a Leonor, otra borbón en el trono?  ¿Con qué numeración estaría? Habrá que esperar unos añitos para resolver estas preguntas.

Efectivamente, son muchos siglos de historia. Resumirlos en un paseo es imposible, pero si que podemos seguir una excursión de un par de horas paseando por los lugares más representativos de esta dinastía real. Estamos hablando del entorno del Paseo del Prado.

Nos remontamos a la época de los Reyes Católicos. En esta zona están los terrenos del monasterio de los Jerónimos, el de las dominicas de Atocha y el de los agustinos recoletos. (de ahí el nombre de esta zona)
Era pues, un lugar principalmente de prados y huertos. (y cercana está la calle de las Huertas)

Por esta zona pasaba en tiempos el arroyo de la Castellana, que está en estrecha relación con uno de los viajes de agua más conocidos de nuestra capital.

Geológicamente hablando, casi toda la Comunidad de Madrid es una cubeta de sedimentación que recoge las aguas de las montañas que la rodean, nutriendo a un gran acuífero subterráneo. El municipio de Madrid es con mucha diferencia el de mayor extensión y población de la Comunidad, y todo él se localiza en la cuenca del río Manzanares, con el centro urbano sobre un altiplano en su ladera izquierda. Así como el Manzanares delimita el centro del casco antiguo por su lado oeste, el arroyo Abroñigal lo hace por el este. Equidistante entre ambos cursos fluviales discurre el arroyo Fuente de la Castellana, tributario del Abroñigal, el cual vierte las aguas en el Manzanares al sur de la ciudad. 

Fuente: Revista "Madrid Histórico"  Manuel García del Moral.

Y aquí estaba uno de los límites de la ciudad, en tiempos de Felipe II, que es, por cierto, el primer monarca que reordena el paseo de Recoletos y el eje del Prado y planta árboles de forma masiva. 
En estos momentos había una construcción muy curiosa, la Torrecilla de la música, a la altura de la carrera San Jerónimo. Era una especie de quiosco en el que vendían aloja, una bebida muy popular que los madrileños tomaban en las fiestas. Era un agua especiada (con miel, canela, jengibre o clavo entre otras cosas) y enfriada con nieve prensada de la sierra.

imagen de arte de Madrid

imagen de gato de Madrid

imagen de memoria de Madrid - cuadro en el Museo Municipal

En el siglo XVII, la cerca de Felipe IV también pasaba justo por aquí. 

Empezamos nuestra visita en la Plaza de Colón.
En este inmenso espacio estaba el convento de los agustinos recoletos (de ahí el nombre de esta zona del Paseo del Prado) 
Marisa nos habla de una capilla especial que había dentro de la iglesia de este convento: la de Nuestra Señora de Copacabana. Este nombre tan evocador corresponde a una virgen muy venerada en Perú. Todo esto podríamos ponerlo en relación con la temática actual de la plaza, donde están los Jardines del Descubrimiento.
Estos jardines, se inauguraron en 1970, con el enorme monumento en hormigón, obra de Joaquín Vaquero Turcios (1977)
Están dedicados al descubrimiento de América y se levantan en el lugar donde se alzaba la Casa de Moneda y Timbre del siglo XVIII. Actualmente está en Doctor Esquerdo, como ya sabemos.

En esta enorme plaza también se sitúa el Centro Cultural de la Villa (llamado ahora Fernán Gómez) y un enorme aparcamiento en el subsuelo.
Desde el 2001, también se instaló una enorme bandera (por lo visto la más grande de España) 

wikipedia

blog emtmadrid.es

Si miramos hacia la calle Génova, podemos ver otros tesoros.
Tenemos las Torres de Colón de Antonio Lamela, que son consideradas un auténtico prodigio en los años 60 (actualmente las están remodelando)
Y la estatua de Fernando Botero, Mujer con espejo

imagen de wikipedia


Y por último, dejando lo mejor para mi gusto, la estatua de Colón neomudéjar de Jerónimo Suñol.
La estatua se erige para conmemorar el matrimonio real entre Alfonso XII y María de las Mercedes de Orleans (23 de enero de 1878), se convocó un concurso público al que se presentaron cuatro proyectos para erigir un monumento a Cristóbal Colón. El ganador fue el de Arturo Mélida, aunque la estatua que remata el proyecto, la esculpió Jerónimo Suñol.

Originariamente el monumento estaba ubicado en el centro de la plaza, pero en 1973, a causa de los trabajos de remodelación de la misma, se trasladó al extremo derecho de los Jardines del Descubrimiento.
En el año 2009 el Ayuntamiento devolvió la columna y la estatua del almirante a su ubicación original en el centro de la rotonda del Paseo de la Castellana.

  
imágenes de wikipedia


Con Carlos III tiene lugar la verdadera reforma urbanística del Prado. Es cuando se remodelan los bulevares y se instalan las grandes estatuas como las de Cibeles, Neptuno o Apolo.
El Museo del Prado y el Botánico empiezan a ser el centro de la cultura.

En el siglo XIX tiene lugar la desamortización y el convento de los agustinos desaparece.
Isabel II instala aquí la Biblioteca Nacional, con los importantes fondos literarios que tenía la corona.
Es un imponente edificio de Francisco Jareño, que además, alberga el Museo Arqueológico por la parte de atrás.

Tomo ahora unas líneas de mi propio blog, de la investigación  que hice cuando fuimos a ver la exposición de hace dos años (febrero de 2019):

En la fachada del edificio: arriba del todo una escultura - alegoría de España.
En la base del triángulo, otras dos esculturas que representan el genio y el estudio.
Un frontón con más alegorías y destacando sobre todo, las maravillosas esculturas realizadas por José Alcoverro, de San Isidoro de León, Alfonso X el Sabio en primer término.
Este escultor, también es el autor de una de las esculturas del monumento de Alfonso XII en el retiro, (concretamente el de la agricultura)

En segundo término, ya de otros escultores, Antonio de Nebrija (redactor de la primera gramática española), Luis Vives (filósofo), Lope de Vega y Cervantes.
También vemos unos medallones, representando a grandes literatos.
Y en cuanto a las rejas, son obra de Bernardo Asins y Serralta, discípulo de Eiffel autor por ejemplo de las Verjas de las puertas de entrada del Banco de España.

imagen propia

imagen propia

Vamos a comenzar ahora un paseíto, siguiendo por todo el bulevar y veremos todo lo que nos quiere enseñar Marisa.

Nada más cruzar, enfrente de la Biblioteca Nacional tenemos una escultura que representa a Andrómaca. Ella es la viuda de Héctor y esclava de Neptólemo (hijo de Aquiles) con el que tiene un hijo.
La escultura recoge el momento en el que ve a su hijo muerto, mostrando toda la desesperación y el desgarro una madre. La obra es del 1853, del malagueño José Vilches.

imagen propia


imágenes de la visita posterior con José Manuel, en diciembre 2024


Casi enfrente, una escultura singular, la llamada Rana del casino "la rana de la fortuna" de Eladio de Mora (2014)

wikipedia


Monumento a Juan Valera, autor de Pepita Jiménez. (1928) La obra es de Lorenzo Coullaut-Valera, sobrino del homenajeado.
La novela española está en auge en estos momentos y Juan Valera es un claro exponente del realismo.

imagen propia

imagen propia


En el siglo XIX se producen las ampliaciones de los ensanches. La nobleza y alta burguesía comienzan a construirse sus palacetes en "las afueras".
En toda la Castellana comienzan a edificarse casas y palacios muy bellos. ¿Quién iba a decirles que estarían en una de las zonas más céntricas de la capital un siglo después?

Nos detenemos ahora frente a la escultura de D. Ramón María de Valle Inclán  del escultor Francisco Toledo (1973). Encargado por el Círculo de Bellas Artes, representa a Don Ramón paseando por su adorado Recoletos.

Este literato refleja en sus obras una dura crítica hacia la sociedad del momento. Es recordado por todos por su creación de la figura del esperpento.
Es un personaje muy peculiar, es muy conocida la anécdota de cómo perdió un brazo en 1899 durante una pelea con el periodista Manuel Bueno Bengoechea. Gran amante de las polémicas, siempre buscaba temas controvertidos en sus tertulias. Con un bastonazo, se le clavo el gemelo y se infectó la herida. Solamente pudieron salvarle, amputándole la extremidad. Pero él siempre se inventaba historias curiosas para contar el por qué de su pérdida.

imagen propia


Llegamos a dos preciosos edificios, que están contiguos y que en la actualidad pertenecen a Mapfre: el Palacio del Duque de Elduayen  y el de Medina de las Torres.
Ambos palacetes guardan ciertas semejanzas, y están construidos sobre un solar que ocupaba el antiguo Circo Price. (!)
El Palacio de Elduayen (1881-1882) del arquitecto Miguel Aguado de la Sierra. 
Propiedad de José de Elduayen, que fue todo un personaje en el XIX. Ingeniero, ministro de Hacienda con Amadeo de Saboya y ministro de gobernación con la regente María Cristina.
También fue gobernador del Banco de España y gobernador civil.
Una de sus actuaciones más memorables es la participación en la abolición de la esclavitud en España (1880) que ponía fin a las prácticas esclavistas aún vigentes en Cuba.
Como curiosidad, albergó la editorial "La Lectura" que publicó por primera vez "Platero y yo" (como recuerda una placa en la fachada)


  
imágenes propias Palacio de Elduayen

El otro edificio, el Palacio de Medina de las Torres (1881-1884) es de Agustín Ortiz de Villajos.

Palacio de Medina de las Torres - wikipedia

Tenemos a esta altura del bulevar la estatua dedicada a los refugiados, que sustituyó en 2019 a la pancarta que estaba en la fachada del ayuntamiento "Refugees Wellcome"
Es obra del brasileño Bel Borba.

imagen propia

En el Paseo de Recoletos nº 10 tenemos una de las construcciones más interesantes de la tarde.
El Palacio del Marqués de Salamanca.
En el XIX hay un éxodo de nobles y nuevos ricos hacia el nuevo barrio de Salamanca.
Este palacio se construye dentro del recinto limitado por la cerca de Felipe IV y aun era una zona suburbana.
José de Salamanca y Mayol, el marqués que da el nombre a todo un barrio, se hizo construir este palacete en su momento de máximo apogeo económico. Era banquero, político y empresario de negocios de muy distintas iniciativas, que iban desde el terreno inmobiliario a los ferrocarriles, pasando por el negocio de la sal. Paralelamente a su actividad empresarial, fue también mecenas de las artes, siendo famosas sus colecciones de arte y arqueología.
A pesar de todo, acabó prácticamente arruinado tras una desastrosa inversión en bolsa y rumores que le relacionaban con asuntos poco claros (de corrupción).

Ahora este palacio es la sede del BBVA. 

wikipedia

Se encarga la ejecución a Narciso Pascual y Colomer en 1856, cuando ya era famoso por su proyecto del Palacio de las Cortes de España, en la Carrera de San Jerónimo.
Como había incrementado su fortuna gracias a un golpe de suerte en la bolsa, el marqués eligió un enorme solar que lindaba con el pósito de Madrid (lugar donde se recogía el grano y que con anterioridad estaba en la zona de las cavas baja y alta) y que había sido propiedad del convento de los agustinos recoletos. En estos terrenos también se encontraba la antigua fábrica de carruajes, con una enorme chimenea.

WIKIPEDIA: En primer plano la plaza de toros de la Puerta de Alcalá, en una vista aérea del Madrid de 1854 dibujada por el grabador, litógrafo y arquitecto francés Alfred Guesdon. Se aprecian, además, el Palacio del Retiro, la Puerta de Alcalá, el Real Pósito y el palacio del Marqués de Salamanca, casi terminado, a la derecha de la imagen. A su espalda, la chimenea de la fábrica de carruajes.


En el siglo XX se añadieron dos pórticos para ampliar aun más su espacio.
En el diseño de los jardines Pascual y Colomer se inspira en el cercano Jardín Botánico de Sabatini, creando una puerta con el escudo del marqués. Este cierre monumental desaparece en 1859 tras la remodelación de este tramo de Recoletos.
En el jardín posterior se instaló un invernadero (estufa) que se cedió al ayuntamiento en 1876, cuando el marqués tuvo que vender el palacio. 

Se instaló en el Retiro, donde está hoy la rosaleda. Sin embargo, durante la guerra fue destruido por completo y solo se conservan el basamento y dos fuentes, la del fauno y la del amorcillo.

 
imágenes de pinterest


En el número 15 nos encontramos con el Palacio López Dóriga, obra de Francisco de Cubas (1872) Justamente el lado tenemos el del Marqués de Alcañices, obra del mismo arquitecto (1865) 
Este arquitecto, nos recuerda Marisa, es el que proyectó la primera Catedral de la Almudena, aquel tan gótico del que se conserva una maravillosa maqueta, que vimos en su momento. 

José Osorio y Silva,  El marqués de Alcañices, conocido también como el duque de Sesto, fue tutor de Alfonso XIII y tuvo un papel destacado en la restauración borbónica.
Convenció a Isabel II para que abdicara, y ella le dijo: «Alfonso, dale la mano a Pepe, que ha conseguido hacerte Rey»
Consejero de Alfonso XII, al que quería como a un padre. Es además considerado como uno de los mejores alcaldes de Madrid.


  
Palacio de Alcañices  (no lo es)                                Palacio López Dóriga
imágenes de wikipedia


Justamente al lado de estos dos edificios (Recoletos 11) nos encontramos con el Convento de San Pascual.
El primitivo cenobio de la Inmaculada y San Pascual era del siglo XVII, pero con la desamortización  de Mendizábal de 1836 se suprime y acaba convirtiendo en un almacén de maderas.
Más tarde, en el XIX, se recupera y construye lo que podemos ver hoy en día. Son monjas clarisas franciscanas.
En el siglo XVII, los Duques de Medina de Río Seco, les edificaron esta iglesia y convento. Ellos eran muy aficionados a ellas, que eran nómadas y se acaban asentando aquí. La actual es del XIX.
En el interior, en la parte del Altar Mayor, podemos ver las verjas con pinchos, los llamados "espanta novios", que eran para eso, para alejar a las novicias del convento de supuestos flirteos... Esta curiosidad, nos la cuenta José Manuel en diciembre del 2024.

Marisa, esto va por ti:

DE WIKIPEDIA:

El nuevo inmueble, financiado con la indemnización resultante y por las arcas municipales, se ubicó en el mismo lugar pero retranqueado respecto a su posición original, dando lugar a un convento de menores dimensiones. Ante la escasez de recursos, parece que en primer lugar fue construida la zona residencial y tres o cuatro años más tarde la iglesia. El primer proyecto del nuevo edificio fue realizado por Urquijo y Gómez en 1863 y consistió en un pretencioso inmueble sumido en la tendencia ecléctica predominante, especialmente relacionado con las tradiciones románica y gótica, con ciertas influencias clasicistas. Dicho proyecto nunca llegó a ejecutarse, posiblemente por cuestiones presupuestarias, si bien el proyecto final mantuvo ciertas características del mismo, tales como las cubiertas y la planta de la iglesia.

En consecuencia, fue realizado un segundo proyecto del que solo se conserva el diseño de la fachada, elaborado por Urquijo en 1865. Gracias a la documentación gráfica existente, generada principalmente a partir del ensanche de Recoletos, se puede concluir que el proyecto definitivo estuvo estrechamente relacionado con el primer convento del siglo XVII, dando lugar a un templo de inspiración neobarroca y corte clasicista, en el que se desechó el pujante estilo neogótico tan asociado a las construcciones religiosas de la segunda mitad del siglo XIX.

El proyecto final dispone el templo en el centro de la fachada principal, idéntica ubicación que en el convento barroco, en lugar de desplazarlo hacia el flanco Norte como proponía el proyecto de 1863; asimismo, mantiene ciertos elementos compositivos exigidos en la primera fachada barroca (escudos, arco de medio punto sostenido por pilastras cajeadas y la imagen de la Inmaculada), que dan continuidad al inmueble del siglo XVII. El diseño actual de la fachada, de corte más sobrio y contenido, aunaba diversas tendencias medievales, con cierta influencia del estilo gótico y de la tradición arquitectónica de la orden mendicante franciscana, con rosetón y piñón, si bien el resultado final también se vio modificado con respecto a las trazas de Urquijo de 1865.

Con motivo del centenario de la beatificación de San Pascual Bailón en 1918 la iglesia fue decorada con pinturas murales en bóvedas y cúpula, obra de Manuel Garrido.

Tanto el monasterio como la iglesia han sido intervenidos en diferentes momentos a lo largo del siglo XX. Se tienen noticias de los daños ocasionados en el convento durante la Guerra Civil, que motivaron una importante restauración en la década de 1940. En fechas posteriores existen dos expedientes de visado: En 1953 se sustituyó parte del forjado de cubierta y en 2008 se pinta la fachada. La iglesia fue restaurada a finales de la década de 1980, cuando fueron intervenidos los retablos y las pinturas murales.
Y esto es lo que he podido averiguar de la iglesia que nos resultó tan rara y curiosa.
Es raro, aunque sabemos que es del XIX, no dejamos de tener la sensación de entrar en un templo del XVII. Ya sabemos por qué.

exterior de la iglesia - de una visita posterior con José Manuel (diciembre 2024)

imagen propia

imagen propia

imágenes de extranjis, de una visita posterior con José Manuel (diciembre 2024)



Si volvemos a mirar enfrente, a la altura del número 4 del paseo de Recoletos, tenemos el edificio de Seguros la Aurora.
Yo trabajo en el tema de los seguros, y sé que es un sector que mueve mucha pasta... pero en las dos últimas visitas, me está quedando clara otra cosa...muchos de los mejores y más bonitos edificios de Madrid, son propiedad de una aseguradora. Me deja ojiplática y me da para pensar un buen rato.

En esta ocasión, lo disfrutamos un poco de lejos, puesto que en esta visita no podemos estar todo el tiempo cruzando de los pares a los impares, pero se aprecia bien la magnífica construcción que tenemos delante.

imagen propia

El edificio de Seguros La Aurora se edificó en uno de los tres lotes en los que se habían dividido los terrenos del pósito. Era una casa-palacio para Ramón Pla Monje, un empresario y se construyó en 1880 por Agustín Ortiz de Villajos.
Con un estilo ecléctico y neogótico, lo que más nos llama la atención (al menos a mi) es la fantástica cúpula rematada con un conjunto escultórico.
La escultura situada sobre la cúpula que remata el edificio representa una mujer joven, la Aurora, que guía una cuadriga. Los caballos se muestran nerviosos y agitados, y la Aurora trata de dominarlos, adoptando una actitud tensa y serena al mismo tiempo. De manera evidente, se identifica con la empresa de seguros y representa la seguridad. 


imagen propia


Llegamos a otro sitio emblemático, y os ilustro la historia haciendo uso de una entrada que preparé cuando Manu y yo fuimos a la excursión "Madrid de miedo", con la empresa Madrid Gosth Tour, regalo de mi jefa.

Lo extraigo todo de esta web:  https://www.abc.es/estilo/gente/abci-autentica-historia-fantasmas-palacio-linares-201807140111_noticia.HTML

Cuenta una leyenda que en la actual sede de la Casa de América habitan los espectros de los primeros marqueses de Linares -José de Murga y Reolid (1833-1902) y Raimunda de Osorio y Ortega- y de una niña que supuestamente era hija del matrimonio. Según el relato, José confesó a su padre, el comercial Mateo de Murga y Michelena, haberse enamorado de una chica humilde llamada Raimunda, hija de una cigarrera del barrio de Lavapiés. Al escuchar el nombre de la joven, Mateo de Murga prohibió a su hijo cualquier contacto con la muchacha y para asegurarse de que zanjaba aquella relación, le envió a estudiar a Londres. Pero la distancia no impidió que el joven José terminara por conocer las razones de su progenitor para impedir su romance: Raimunda era su hermana, fruto de una relación extramatrimonial de Mateo de Murga con la cigarrera. Pese a todo, José y Raimunda consiguieron una bula papal, «Casti convivere», con la que podrían vivir juntos, aunque en castidad. Sin embargo, engendraron a una niña, Raimundita, a quien emparedaron al poco tiempo de nacer para que el incesto jamás saliera a la luz. Y su fantasma comenzó a vagar por las estancias del palacio.
Pagos por silencio.

Y hasta ahí una leyenda que durante décadas ha circulado por Madrid. Lo que sí es cierto es que junto a los marqueses de Linares crecieron dos niñas, a las que reconocían como sus «ahijadas». Una de ellas se llamaba Raimunda Avecilla y Aguado, y pasaba por ser la hija del abogado del marqués, Federico Avecilla y Delgado, y de Raimunda Aguado y Cabañas. En 1892, Raimunda Avecilla dio a luz a Aniceta María Ana de Jesús de la Santísima Trinidad, fruto de una aventura con su padrino: el marqués de Linares. Aniceta murió en 1946 y ahora su nieta, Dolores Martínez, ha presentado una demanda de filiación en un juzgado de primera instancia de Madrid contra los herederos de los aristócratas. La principal beneficiaria en su día fue Raimunda Avecilla, la madre de Aniceta, quien todos los meses acudía a la casa de Bartolomé Carrasco Poza, el encargado de las tierras que el marqués tenía en Baeza (Jaen), para entregarle una cantidad de dinero. «Mi abuela (Aniceta) llegó a Baeza en 1904, cuando tenía 12 años. Ya había terminado el colegio en Linares y en ese momento la herencia del marqués ya estaba repartida», cuenta Dolores en conversación telefónica con ABC. «Siempre iba con su madre, Raimunda Aguado y Cabañas, y 
pagaban a Bartolomé por su silencio. Él tenía dos hijas de la edad de mi abuela, que se criaron como señoritas mientras Aniceta -a quien llamaban Dolores- hacía las labores de una criada», afirma Dolores Martínez. Esas tierras que Anicenta labraba junto a Carrasco «eran unas propiedades que José de Murga quería que en el futuro heredase Aniceta». Aunque al no reconocer el marqués a la niña, se quedó sin nada.

Dolores Martínez lleva diez años recabando documentos sobre los orígenes de su abuela. Asegura que su madre, Amalia Jodar Cruz (1928-1992), «nunca habló» sobre este asunto con gente que no fuera de la familia. «Pensaba que nos podían matar si lo contábamos». Antes de morir, Amalia se cortó un mechón de pelo y se lo entregó a su hija. «Cuando vio que iba a morir sin hacerle justicia a su madre, me pidió que lo guardara». Una muestra de ADN que podría servir para demostrar la filiación. «Ella tenía miedo, yo no. 
No reclamo dinero, solo quiero que se sepa la verdad sobre lo que le ocurrió a mi abuela. Todos se aprovecharon de ella, es una historia muy triste». Las últimas conversaciones con los Carrasco han sido muy tensas: «Me dicen que qué busco ahora, que si busco el dinero que ellos no tienen. Y que deje a los muertos en paz».

A lo largo de estos años, Dolores ha hablado con los descendientes de los marqueses. Desde Alicia Villapadierna, nieta de Raimunda Avecilla, y su marido Ricardo Arranz, así como Antonio Martín de Santiago-Concha -el último marqués de Linares, quien falleció el pasado mes de marzo- y los descendientes de Carrasco. «Alicia siempre me dijo que no sabía nada sobre el tema, que no llegó a conocer a su abuela, y me puso en contacto con parientes suyos. Todos ellos conocen la historia de mi familia, porque además conocían a los Carrasco, pero ellos siempre lo han negado y nunca me han dejado explicarme».

«La mataron en vida»

Precisamente en 1992, el Palacio de Linares reabrió sus puertas tras una larga rehabilitación. «Mi madre no llegó a visitarlo porque murió meses antes. Fui con mi marido y salí de allí mala, porque en una foto de la marquesa yo vi a mi madre, se parecían muchísimo». En su empeño por querer saber toda la verdad sobre la familia de su abuela, Dolores se puso en contacto con el Vaticano para intentar confirmar si los marqueses de Linares eran hermanos, tal y como dicta la leyenda: « 
Mandamos una carta y nos contestaron diciendo que no habían encontrado ninguna bula papal».

También escribió a Santiago Miralles, el director de la Casa de América, pero no tuvo respuesta. «Los fantasmas existen, porque no descansan. La ‘‘niña fantasma’’ me imagino que será mi abuela. Ella nació en el Palacio y después la mandaron a Linares a estudiar y, de ahí, a Baeza». Al llegar a Baeza, Juan Pedro Cruz Moreno, el sacerdote de la Iglesia del Santísimo Salvador, redactó unos documentos que decían que a la niña la habían abandonado en la puerta de iglesia y que a los ocho meses había muerto: «La mataron en vida». Dolores tiene ese documento, también la otra partida de nacimiento que le hicieron a su abuela para casarse, donde aparecía con el nombre de Dolores, en lugar de Aniceta. «Le pusieron también una fecha de nacimiento falsa, decían que había nacido en 1904, cuando la herencia del marqués ya estaba repartida». Además de pensar que su abuela no ha descansado -«no pudo decir nada nunca, ni hablar con nadie de su familia; la mataron en vida»-, Dolores 
identifica su historia con la de La Cenicienta. «Mi madre me contaba todas las noches ese cuento, y siempre me decía: ‘‘Hija, La Cenicienta tuvo un final feliz, pero tu abuela no lo pudo tener’’.
 


Y ahora dejo unas fotos de la única parte que podemos visitar (por cierto, abierto al público general) 
Vemos la "casita de muñecas" que se hizo supuestamente para la niña Raimunda, y la terraza, que también tiene servicio de restaurante y que, como no, se llama "Raimunda"


imagen propia


imagen propia


imagen propia

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En la Plaza de Cibeles tenemos varios edificios increíbles. 

El Palacio de Linares, que acabamos de ver brevemente. 
El Palacio de Buenavista y el Banco de España.
Además, el impresionante conjunto escultórico de la Cibeles, obra de Ventura Rodríguez y Roberto Michel.

El Palacio de Buenavista, no podemos siquiera verlo de cerca, puesto que queda dentro de los jardines delimitados por una gran verja.
Es de fines del siglo XVIII y la primera moradora real fue la madre de Carlos III, Isabel de Farnesio. (aunque la primera construcción era del XVI)
Con la ocupación francesa el palacio estuvo a punto de convertirse en un museo, "el Josefino", repleto de obras de arte, pero finalmente esto no sucedió. y el edificio se cedió al ejército en 1816.
Actualmente es el Cuartel General del Ejército de Tierra de España... casi na'

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Por último tenemos la sede del Banco de España. Nació como templo económico y como órgano regulador, hacia el 1856.
La primera sede estaba ubicada en el edificio de los Cinco Gremios Mayores (que vimos en otra visita) en la plaza de Jacinto Benavente.
Para la construcción de la nueva sede, se compró el desaparecido Palacio de Alcañices, que estaba en este mismo lugar. El nuevo edificio de 1884 fue ejecutado por Eduardo Adaro y Severiano Sainz de la Lastra. 

El edificio tiene, gracias a la disposición de sus vanos una marcada horizontalidad. 
En un estilo ecléctico, en el que se mezclan elementos del barroco, modernismo... sin embargo, conserva la suficiente sobriedad, como para no desentonar con la actividad que se realiza en su interior.

imágenes propias

En toda la reja y en varios relieves de la fachada podemos ver el báculo o vara de mercurio. El llamado caduceo, que se asocia a Hermes o Mercurio, el mensajero de los dioses. Estas dos serpientes enfrentadas y enrolladas en una vara, con unas alitas en la parte superior, representan a todo aquello relacionado con el comercio y la mensajería. 




Este símbolo, muchas veces se puede confundir con el bastón de Esculapio o Asclepio (Dios de la curación en la mitología griega) y que es ligeramente distinto, una única serpiente enrollada en torno a un bastón.



Así pues, este es un símbolo de comercio, la vara de poder con las fuerzas enfrentadas de la oferta y la demanda controladas bajo esta institución del Banco de España.

imagen propia

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imagen propia

imagen de otra visita en el 2024


Rafael Moneo rehízo una parte en los años 90, la que colinda con la calle Marqués de Cubas.
A mí particularmente me gusta, y eso que no suelo estar de acuerdo con las reformas de este buen señor.

tres aspectos de la peculiar ampliación - imágenes de otra visita de diciembre 2024


Podemos ver enfrente de la fachada que da al Paseo del Prado, el Museo Naval (nuestra visita gafada, que se ha pospuesto ya en tres ocasiones...)
Un precioso edificio de estilo medievalista, realizado por José Espeliu (el autor de construcciones como el Teatro Reina Victoria, los Cines Ideal o la Plaza de toros de las Ventas)
Desde aquí tenemos una bonita vista del mismo.


imagen propia


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Continuamos la visita por el "Salón del Prado" como se llamó a esta reorganización del paseo del Prado en el XVIII. 
Proyectado por el urbanista José de Hermosilla con una forma alargada y haciéndose cargo Ventura Rodríguez de los elementos escultóricos (las fuentes).

En origen estaban: las fuentes de Cibeles, Neptuno, Apolo, las cuatro fuentes o fuentecillas y la fuente de la Alcachofa en Atocha (actualmente en el parque del Retiro)
Ya hemos visto la de Cibeles y andando por el centro del paseo, hemos llegado a la Fuente Apolo y las Cuatro Estaciones, (1780) obra de Manuel Álvarez, el griego.
La fuente representa al dios Apolo, que curiosamente tiene los rasgos de Carlos III. En sus pies, cuatro figuras humanas representando a las cuatro estaciones.
Es una pena que esta estatua, al estar peor situada no se disfrute o visite tanto como a sus dos hermanas cercanas. Aunque yo, casi me alegro, este lugar es un remanso de paz.

imagen propia 

imagen propia 

En la cercana Plaza de la Lealtad, tenemos otra pequeña joya, el Monumento a los Caídos por España.
En un principio, estaba dedicado sólo a los fusilados en el 2 de mayo 1808, puesto que este lugar fue uno de los emplazamientos donde se produjeron tales fusilamientos.
Es de 1820 de Isidoro González Velázquez. 
Desde 1985, está homenajeando con su llama eterna a todos los caídos (no solo a los de 1808)


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Muy cerca (podemos intuirlo detrás), el Palacio de la Bolsa.
Es un edificio neoclásico inaugurado en 1893 como sede de la Bolsa de Madrid. El diseño es de Enrique de Repullés y Vargas.
Resulta impresionante, con sus seis columnas in antis (adelantadas) en la fachada.
En el atrio existen cuatro relieves que representan el comercio, la industria, la agricultura y la navegación. Alegorías que bien representan la actividad que se desarrolla en el interior del edificio.

imagen de wikipedia

La palabra bolsa hace referencia a dónde guardamos el dinero.
Pero también nos cuenta Marisa que debe su origen a una familia de la ciudad de Brujas llamada Van Der Buërse. Esta familia noble habilitó un edificio de su propiedad con la única finalidad de organizar reuniones de carácter mercantil y facilitar encuentros entre hombres de negocios que cerraban allí sus acuerdos y transacciones.
Su escudo familiar era algo parecido a esto (véanse las tres bolsas...)



Ahora, otro palacio con historia. El Palacio Villahermosa, antigua mansión de los Duques de Villahermosa. 
Hoy es el conocido Museo THyssen-Bornemisza, que alberga multitud de obras de arte, propiedad del barón Thyssen y señora.
Parece ser que el cercano Museo del Prado perdió la magnífica oportunidad de hacerse con el palacio y así contar con un espacio extra para exponer.

Es del siglo XVIII, y fue reformado en el XIX, con un estilo más neoclásico, tras una remodelación de Antonio López Aguado, discípulo de Juan de Villanueva.
A mediados del XIX era una de las residencias más ilustres de Madrid, donde se celebraban fiestas y veladas culturales.
En los años 70 fue sede de un banco y en los 90 pasa a pertenecer a los Thyssen.
Más recientemente ha sido reformado por Moneo, con más o menos acierto...

En el frontón hay un escudo de los Villahermosa, que no se puso en la fachada principal de la Carrera de San Jerónimo porque estaba enfrente otro palacio, el de los Duques de Medinacelli, con su escudo también y al tener mayor rango, no podía estar "haciéndole sombra" 
Cosas del protocolo nobiliario.


imagen de museo thyssen.org

Aquí tenemos la estatua del dios Neptuno, guiando a sus hipocampos (que no caballos) (1782-86)
Diseñada por el arquitecto Ventura Rodríguez, sobre bocetos de Miguel Ximénez. Las esculturas se le encargaron a Juan Pascual de Mena. Las terminaron José Arias y José Rodríguez.

ANÉCDOTA:
En Madrid estamos siempre dispuestos a las chanzas y chascarrillos. Así se cuenta que en la posguerra, le colgaron un cartel que ponía: "Dadme de comer o quitadme el tenedor", tristemente haciendo alusión a la terrible hambruna que soportaba la ciudad.

Es el mítico lugar donde el club de fútbol del Atlético de Madrid celebra sus triunfos, muy cerca de Cibeles que es donde festeja el otro equipo, el Real Madrid.

wikipedia

En esta Plaza de Cánovas del Castillo, además de disfrutar con el dios Neptuno, podemos ver dos maravillosos hoteles que datan de principios del siglo XX. El Hotel Palace y Hotel Ritz.
Después de la boda de Alfonso XIII, quedo claro que en la capital no había ningún lugar capaz de alojar a invitados tan ilustres a este tipo de eventos, así, se construyen ambos hoteles para subsanar el problema.
Promovido por Benigno Valle Inclán (el caballero del Museo del Romanticismo y el promotor de los Paradores Nacionales y el turismo español) se construyen uno enfrente del otro. Hoy en día siguen rezumando glamour y exclusividad y alojan a personajes de lo más variopinto.
Además de estar cerca del Retiro y en una zona noble, tiene muy cerca la estación de Atocha, que hacía muy fácil el acceso a la zona.
Se ponen de moda los salones de té, moda que llega desde la victoriana Inglaterra y se empieza a dar de lado a una bebida más que popular en nuestro país, el chocolate, en favor de la elegante infusión.

Hotel Ritz - wikipedia

Hotel Palace - wikipedia

Estamos ya próximas al final de la visita, pero aun quedan un par de cosas interesantes.
Por un lado el Museo del Prado, por otro el Botánico.

El Museo del Prado, proyectado por Juan de Villanueva, en un principio fue concebido como Real Gabinete de Historia Natural. Junto con el cercano Real Jardín Botánico y el Real Observatorio Astronómico, iban a formar parte de un conjunto llamado "la Colina de las Ciencias".

El proyecto de esta remodelación del Salón del Prado fue aprobado por Carlos III en 1786. 
El edificio fue construido durante los reinados de Carlos III y Carlos IV, y para el XIX estaba prácticamente terminado. Peeeero... llegaron los franceses, y como siempre, lo fastidian todo. Convierten el gabinete en cuartel de caballería y usan gran parte de las planchas de plomo de los tejados, para hacer balas... en fin.

Menos mal que después, con Fernando VI y a su segunda esposa, María Isabel de Braganza, se recuperó y dotó de muchas obras de arte de su patrimonio. Y se convirtió en un museo, sede de colecciones reales.
El resto de las obras, proceden en gran medida de iglesias y conventos que estuvieron afectados por la desamortización de Mendizábal. (p.e. Museo de la Trinidad - Convento de la Trinidad Calzada)
Y también hay una parte importante de colecciones reales y donaciones de todo tipo.

Todo ello ha convertido al Museo del Prado en una de las pinacotecas más importantes del mundo.

En la entrada principal podemos ver la famosa escultura de Velázquez, obra de Aniceto Marinas, del 1899. Seis grandes columnas que reciben un impresionante frontón, que retrata a Fernando VII como protector de las artes.
Juan de Villanueva no lo vio terminado, puesto que falleció antes.

imagen propia 


imagen propia 


imagen propia 


imagen propia 


Hay dos puertas más, la fachada norte, que da al lado de San Jerónimo y que cuenta con una escultura de Goya y la de Murillo, que tiene enfrente el Real Jardín Botánico.
En esta plazuela de Murillo se encuentran las cuatro fuentes o las fuentecillas, que también formaban parte del proyecto de remodelación de Carlos III.
Obra de Ventura Rodríguez, de factura idéntica estaban hechas de caliza de Colmenar de Oreja.
En la parte de arriba, unos niños tritones juegan con delfines.
Las originales están ahora en el Museo de los Orígenes de Madrid (Museo de San Isidro en la plaza de San Andrés) Éstas que vemos, son una copia de resina, material mucho más resistente a las inclemencias.

imagen propia

  
escultura de tritón original                                una de las fuentes         
imágenes de wikipedia


El Real Jardín Botánico tiene dos bonitas puertas, la de Villanueva, en esta plaza de Murillo y la de Sabatini, que da al Paseo del Prado y que era la puerta por donde entraba el rey. 

Puerta de Villanueva - imagen de esmadrid.com

Puerta de Sabatini - imagen propia

museo del Prado

Ahora hay un espectáculo de luces que, si bien se creo para la navidad, sigue celebrándose, para deleite de los madrileños.


imagen propia 

 
imagen propia 
 

Un par de apuntes, antes de finalizar la visita en la Atocha.
Por un lado, el Ministerio de Sanidad, organismo creado durante la segunda república.
Y cuyo edificio es de lo más interesante:

wikipedia

En este lugar estaba el Palacio de Xifré, una maravilla neoárabe, del que he encontrado una foto en la web imágenes del viejo Madrid (http://www.viejo-madrid.es/paginas/s_XIX/S_XIX-151.html)

fotografía de J. Laurent


Y por otro, la plaza de Platerías Martínez.
Un lugar de encuentro, una placita adorable con terracitas que guarda un pasado de lo más curioso y desconocido a la vez.

imagen de Revive Madrid

En este lugar estaba la famosa sede de las platerías Martínez, una Real Fábrica, escuela de plateros que impulsó el arte de la orfebrería. 
Este espectacular edificio desapareció en 1869, tras el reinado de Isabel II.

imagen de pasión por Madrid

wikipedia

Por último, ya en la Glorieta de Atocha, dos curiosidades más. (y ya acabo)

Tenemos la fuente de la Alcachofa, de Ventura Rodríguez. Formaba también parte de la remodelación del Salón del Prado.

En la actualidad lo que vemos, es una copia de bronce. El original se trasladó al Retiro en 1986 cuando Enrique Tierno Galván remodeló la plaza y quitó el "scalextric"
Y allí sigue, en la plazoleta de Honduras. Al lado del estanque.

 
 original en el Retiro                                 copia en la Glorieta de Atocha
imágenes de wikipedia


Y, casi se nos escapa un pequeño conjunto escultórico de dos amorcillos con una copa que está al principio del paseo. Parece ser que estos amorcillos proceden de la cercana Cibeles. Se asemejan mucho en cuando a factura.
Solo he podido localizar esta imagen. Yo creo que podéis verlos sin problema "in situ", con la suficiente curiosidad.

imagen de pinterest Paloma Muñoz

Y hasta aquí nuestra visita de hoy.
Interesante, como siempre, con unas explicaciones maravillosas de Marisa, puedo tirar del hilo de la historia y aprender muchísimo, como cada semana.

Esto de "Conocer Madrid" me da la vida, en serio.