miércoles, 20 de abril de 2016

COMIDA CHINA FÁCIL PARA HACER EN CASA

POLLO AL LIMÓN - RECETAS DEL SR.SR

El pollo al limón es uno de los clásicos de los restaurantes chinos junto con el arroz, la ensalada china, los rollitos de primavera y el cerdo agridulce. Me pidieron que si podía hacer el pollo al limón casero y aquí está. He cogido ideas de varios blogs porque cada uno lo hacía de una manera así que he cogido los ingredientes para la receta y he hecho mi versión.
La receta china en cuestión, lleva por lo menos 1 hora de preparación pero merece la pena, ya que os aseguro que si seguís los pasos al pie de la letra sale igual que en el chino o incluso mejor porque por lo menos sabemos que nuestra receta es casera al 100%.
Es uno de los platos preferidos de la comida china, por eso espero que esta receta os sirva mucho a todos y que si la hacéis un día me día que tal os ha salido ya que esas cosas me hacen mucha ilusión. Un abrazo muy fuerte familia.

Ingredientes para 4 personas

· 5-6 filetes grandes de pollo (Seguro que alguien repite)

· Salsa de soja

· Sal

· 1 huevo

· 25 gramos de maizena

· Media cucharada de levadura Royal

Para la salsa

· El zumo de 1 limón

· 25 gramos de maizena (yo he sustituido por harina y espesa igual así que si no tenéis no pasa nada)

· 350 ml de caldo de pollo (Yo he puesto un vaso de agua con media pastilla de avecrem)

· 70 gramos de azúcar

· Sal

· 4 rodajas de limón


Elaboración

1.- Comenzamos macerando los filetes de pollo en salsa de soja, le ponemos un poco de sal pero no mucha ya que la salsa de soja ya le aporta sal. Lo tapamos con un film y lo dejamos mínimo 30 minutos en la nevera.

2.- Para la salsa: Ponemos en un vaso de batidora, el azúcar, el zumo de limón, el caldo de pollo, la maicena o harina y batimos bien.


3.- Ponemos a cocer en una cacerola a fuego lento con las rodajas de limón mientras freímos los filetes.

4.- Para el rebozado: Mezclamos el huevo batido con la maicena y la levadura royal y empanamos cada filete previamente macerado. Preparamos una sartén con aceite muy caliente.

5.- Freímos los filetes en el aceite y los sacamos a un plato con un papel absorbente para que absorba el aceite y así poder quitar gran cantidad de calorías, porque este plato digamos que light no es jejeje.


6.- Una vez dorados todos los filetes de pollo, los introducimos en la salsa de limón para que terminen de cocinarse y se liguen los sabores.



VERDURAS SALTEADAS AL ESTILO CHINO - COCINA SALUD



Esta receta de verduras salteadas al estilo chino es muy fácil de hacer y las verduras conservan todas sus vitaminas y colores…si se acompañan con arroz blanco o mejor integral o pasta, queda un plato completo.

Ahora que el calor aprieta, nos irá bien hacer comidas rápidas y refrescantes…

Ingredientes: para cuatro personas

· 150 g de champiñones

· 2 calabacines

· 4 zanahorias

· 100 g de tirabeques

· 1/2 col china

· 4 dientes de ajo

· 1 cebolla

· Sal al gusto

· Salsa de soja al gusto

· 1 cucharadita de curry en polvo o en pasta

· 2 cucharadas de sake o jerez (opcional)

· 50 ml de aceite de oliva

Limpiar y trocear todos los ingredientes y guardarlos por separado. Calentar el aceite en el wok o sartén y echar los ajos, la cebolla y la zanahoria, rehogar unos minutos, añadir los calabacines, rehogar unos minutos, agregar los champiñones, los tirabeques, la col china, la salsa de soja, el jerez, la sal y el curry, rehogar unos minutos y ya está.

Servir con arroz blanco o integral o pasta.

Nota: se pueden variar las verduras al gusto o las que se tengan en casa, sólo hay que tener en cuenta que primero hay que rehogar las verduras más duras, las que tardan más en cocer e ir añadiendo verduras hasta terminar con las más fáciles de cocer.

También se pueden rehogar las verduras por separado y al final juntarlas todas.


FIDEOS CHINOS FRITOS CON POLLO Y VERDURAS– DE RECHUPETE


· 4 PERSONAS

· DIFICULTAD FÁCIL

· 1,4 EUROS/PERSONA

· TIEMPO DE PREPARACIÓN: 25 MINUTOS


INGREDIENTES

· 200 g. de fideos chinos tipo noodles de trigo

· 1 pimiento verde

· 1/2 pimiento rojo

· 250 g. de pechuga de pollo

· 50 g. de Pak Choi, Paksoi o Bok Choy (podéis sustituirla por repollo o col)

· 3 dientes de ajo

· 50 g. de tirabeques (podéis sustituir por judía verde)

· 6 cucharadas de salsa de soja suave

· 30 g. de cebolla china

· 100 g. de setas (en este caso eran shiitake)

· Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)

· 100 ml. de aceite de girasol

En nuestra cocina siempre tenemos fideos chinos como fondo de armario, te salvan una cena rápida o para preparar el plato de hoy, con pollo y verduras salteadas en el wok. Esta receta admite un montón de variaciones, tanto en los ingredientes como en la preparación. Los podéis tomar con más caldo, como si fuese una sopa de noodles o más crujientes, pasándolos un poco más en aceite, un plato para los que les guste crear y divertirse cocinando. Si eres de los que miras la nevera y ya sabes que cocinar, son perfectos, porque puedes añadirle tus ingredientes preferidos. No hace falta que vayas corriendo al supermercado para hacerlos, podéis prepararlos con verduras, carnes, pescados, mariscos e incluso con legumbres. ¿Qué os parecen?

Los orígenes de los famosos fideos, aunque casi todo el mundo piensa que las pastas provienen de Italia, fue en realidad en China, donde desde hace más de un milenio se preparaban fideos semejantes a los tallarines. Su origen es muy discutido entre italianos, árabes y chinos, pero la primera referencia histórica de este plato fue escrita durante la Dinastía Han. En octubre del año 2005 se descubrió el fideo más antiguo del mundo en Lajia a lo largo del Río Amarillo en Qinghai, China. Con lo que queda confirmado el origen de los fideos, tienen más de 4000 años de antigüedad y no eran de trigo, el cereal empleado era el mijo.

Los fideos chinos se preparan con una pasta ligeramente salada, por lo que no es necesario añadir sal al agua a la hora de cocerlos. Otra ventaja es que su tiempo de cocción es muchísimo menor que la pasta italiana, suelen cocinarse muy rápido, en 5 minutos están listos. Además en la actualidad se pueden encontrar fideos de todos los tamaños y sabores, con lo que es muy fácil variar la receta y hacerla a tu gusto. Utilizamos los más comunes en todos los supermercados, los de trigo con huevo, lo podéis encontrar sin huevo también, aunque con los de arroz también queda muy bien esta receta. Los podemos freír o cocinar al vapor, pero lo que hace especial a un plato de fideos chinos, es con qué se lo acompaña, unas tiras de pollo tierno y verduras crujientes. Una receta realmente rica y muy fácil de preparar, tuneada al estilo rechupete pero con un toque oriental. Espero que os guste y os animéis en casa a prepararla.


COCCIÓN DE LOS FIDEOS CHINOS


1. Añadimos los fideos al wok con agua muy caliente y sin sal. Hay que tener cuidado porque estos fideos tardan menos en cocerse que la pasta italiana, generalmente requieren menos de 5 minutos para llegar a su punto. De hecho algunos fideos alcanzan este estado en menos de un minuto, estando listos para servir.

2. Así que con 4-5 minutos es suficiente, los retiramos del fuego, escurrimos y los pondremos bajo el grifo para enfriarlos e impedir que sigan cociéndose.

3. En el mismo wok vamos a preparar después el pollo y las verduras estén en su punto. El líquido de la cocción no lo tiramos, nos puede servir para tomar los fideos como si fuese sopa, lo dejo a vuestra elección.

PREPARACIÓN DEL POLLO Y LAS VERDURAS. PRESENTACIÓN FINAL


1. Picamos muy finito el ajo o directamente lo machacamos para que nos quede como puré. Reservamos.

2. Limpiamos el pollo y le quitamos posibles restos de grasa o tiernilla. Cortamos la pechuga en tiras y las reservamos.

3. Añadimos un poco de aceite (de oliva virgen suave o uno de semillas, el de girasol es perfecto) en una sartén o wok y echamos el ajo. En cuanto veamos que el ajo cambia de color añadimos el pollo en tiras y dejamos que se haga un poco pero sin que se llegue a dorar.

4. Salteamos a temperatura máxima y vertemos la salsa de soja, no vamos a añadirle sal, con la soja es suficiente. En cuanto el caldito del pollo y la soja reduzca, retiramos del wok a un plato y seguimos con la receta.

5. Lavamos muy bien todas las verduras y las cortamos en tiras finas, en juliana, excepto las setas que las cortaremos en cuartos.

6. Cuando tengas toda las verduras listas las añadimos al mismo wok donde hemos preparado el pollo con unas gotas de aceite. Vamos a hacerlas en el siguiente orden, primero el pimiento rojo y verde (un minuto a temperatura alta) y luego los tirabeques y la cebolla china (otro minuto a temperatura alta). Removemos todo muy bien y cocinamos unos 3 minutos con una cucharadita de soja. Retiramos del wok y vamos con las siguientes verduras.

7. Salteamos las setas con otras gotas de aceite y cuando suelte parte de su agua echamos el pak choi. Los dejamos unos 4 minutos hasta que haya reducido el agua. Sacamos del wok y reservamos.

8. Echamos un par de cucharadas de aceite de girasol al wok y añadimos los fideos chinos, freímos durante un minuto moviendo constantemente para que no se quemen. El fuego debe estar entre bajo y medio para que los fideos chisporroteen pero sin quemarse.

9. Pasado el minuto añadimos el pollo y las verduras recién hechas al wok y mezclamos todo con una cuchara para que se junten bien los sabores.

10. Decoramos cada plato con un poco de cilantro picado y lo espolvoreamos por encima de los fideos chinos. Los servimos calentitos, con o sin palillos.



SOPA CHINA DE POLLO Y VERDURAS– MERCADO CALABAJIO

Y para triunfar totalmente lo mejor es seguir al pie de la letra dos pequeñas técnicas, primero, dejar las verduras al dente, fundamental, y segundo, hay que condimentar adecuadamente la sopa. En este caso así hicimos, y como aderezos usamos soja, vinagre, ajo, pimienta deSichuán y coriandro, pero quedan genial con otros aderezos como jengibre, mostazas de tipo karashi/wasabi, leche de coco, curry, mirim etc. Ojalá os guste y la hagáis en casa, es muy sencilla y no usamos ni vinagre de arroz, y si nos apuráis, podéis usar espaguettis en vez de estapasta china, aunque los tiempos de cocción se alargarían y la pasta sería lógicamente más gruesa. No es lo mismo pero si usáis un vinagreblanco os puede resultar familiar porque aquí en España nos han acostumbrado a esto. Curiosamente, este detalle se une a otros como que a las sopas chinas y muchos platos añaden un poco de vino de Jerez,podéis hacerlo si gustáis.

Vamos con esta fácil receta de sopa china con verduras y pollo para 4-5 personas, 150gr de fideos chinos, 1 pechuga de pollo grande, 1 pimiento rojo dulce, 1 pimiento verde tipo italiano, 1/2 cebolla, 1/2 puerro (incluída su parte verde), 1 ramita de apio, 2-3 dientes de ajo, 1 zanahoria grande, una cucharada sopera rasa de pimienta de sichuán (si no tenéis poned 1 cucharadita de pimienta), media cucharada decoriandro, medio vaso de vinagre blanco, medio vaso de salsa de soja, 250ml de caldo de ave, 500ml de agua y aceite de girasol.

Lo primero vamos a dejar macerando el aderezo, majamos los ajos con una pizca de sal para que no se nos escurra, el coriandro y la pimienta.

Una vez bien majado, echaremos parte de la soja y del vinagre y lo dejaremos macerar un par de horas.
Al cabo de ese rato, lavamos y partimos las verduras como veis, trozos menudos que se puedan coger con cuchara.
Salteamos la zanahoria en un poco de aceite de girasol y a fuego fuerte, lo que es un minuto y medio removiendo de vez en cuando. Reservamos.
Ahora la cebolla y el apio, fuego fuerte durante 30 segundos, si falta un poco más de aceite, añadirlo. Reservamos junto con la zanahoria.
Ahora los pimientos, 45 segundos, reservamos.
Por último vamos con el puerro, lo mismo pero 20-30 segundos. .
Apartamos el wok del fuego y vamos a filetear el pollo haciendo bastones largos. Luego lo cortaremos en trozos más menudos, pero ahora saltearlo así.
Saltearlo 1 minuto y medio a fuego fuerte, podéis echar una pizca de sal. Reservar.
Aquí la verdura y el pollo troceado con tijeras y reservado.
Sobre los jugos que han soltado y verduras y carne, echamos el caldo de ave, el agua y el resto de vinagre y soja.
También el jugo del majado bien colado, y probaremos el punto de sal, podéis echar más soja.
A continuación echaremos la pasta.
Y cuando se ablande, las verduras, dejaremos cocer 6 minutos. Si usáis espaguettis cocerlos bien antes, y luego incorporar la verdura.
Lo último el pollo, echar y apagar. Sin cocer más. Listo.

Servir inmediatamente. Si sobra, escurrir el caldo en un tupper de cristal, y dejarlo seco hasta que lo consumáis, por supuesto luego lo volvéis a integrar calentando sólo el caldo.



SOPA CHINA – CON TU PAN TE LO COMAS

SOPA CHINA DE POLLO 



Estoy encantada con esta sopa china. Generalmente cuando pruebo receta nueva, siempre le encuentro algún pero y la repito con algún cambio. Y si al final me convence, entonces la publico en este blog.
Pero esta sopa es que me ha salido redonda a la primera, no le quito ni le añado nada, me encanta tal cual!
Me gustaría decir de dónde saqué la receta pero la tenía copiada en una libreta, y ni idea de dónde la copié, pero desde luego la haré muchísimas veces.
Sobre la receta, parece más complicada de lo que es en realidad, de hecho es una sopa la mar de fácil y una vez que la has terminado te das cuenta de que era facilísima.
Vamos allá:

Ingredientes:
- 200 gr. de pollo (pechuga o contramuslo)
- 100 gr. de jamón de york
- 1/2 repollo pequeño o 1/4 si es muy grande
- 1 zanahoria grande
- 1 y 1/2 l. de agua
- 1 pastilla de caldo de pollo
- 2 Cdas. de aceite de oliva
- 2 Cdas. de maizena + 4 Cdas. de agua
- 2 Cdas. de salsa de soja
- 3 Cdas. de vinagre de manzana
- 1 huevo
- 3 o 4 gotas de aceite de sésamo

Elaboración:
Para tenerlo todo preparado y empezar en condiciones, cortamos el repollo en tiras finas, la zanahoria en bastones también finitos y el pollo y el jamón también en tiras. Yo siempre prefiero contramuslo que pechuga porque me parece demasiado seca.

Empezamos poniendo a hervir el agua con la pastilla de caldo de pollo, y cuando esté disuelta le añadimos 2 cucharadas de aceite de oliva. Podría hacerse con caldo casero, pero para mi que me encanta la comida china, las pastillas de caldo le dan un sabor mucho más parecido a lo que esperamos. No sé exactamente qué llevan esas pastillas pero el caso es que le dan el sabor adecuado.

Ahora que el caldo está hirviendo, incorporamos el pollo. En unos minutos habrá cambiado de color y entonces añadimos la zanahoria. Dejamos unos minutos que hierva y añadimos el repollo en tiras. Esto lo dejaremos por lo menos diez minutos a fuego medio-bajo. Es el momento de añadir el jamón de york en tiras y dejar que siga hirviendo lentamente unos minutos más.

Mientras hierve la sopa lentamente, disolvemos la maizena en las 4 cucharadas de agua, y también le ponemos las 2 cucharadas de soja y las 3 de vinagre de manzana, queda igualito que un café con leche.

Añadimos esta mezcla a la sopa. Esto sirve para dos cosas, en primer lugar la maizena hará que el caldo espese un poquito (mínimo pero necesario) y en segundo lugar la soja le dará el punto de sal porque hasta ahora no le habíamos añadido nada más que la pastilla de caldo.
Ahora vamos con los típicos hilitos de huevo que llevan las sopas chinas. Lo más cómodo es meter el huevo batido en un biberón de cocina, así salen los hilitos muy finitos. Echamos el huevo con el biberón y a la vez removemos con una cuchara de madera.
Retiramos la sopa del fuego y le añadimos unas 4 gotas de aceite de sésamo. A mi el sabor final me encantó, no sé hasta qué punto es necesario el aceite de sésamo pero si lo tienes se lo pones.
Por último la probamos de sal y si hubiera quedado algo sosa entonces le ponemos un puntito de sal. Para mi no fue necesario pero en casa algunos le pusieron una pizquita.



CERDO AGRIDULCE - SALSEANDO EN LA COCINA



Ingredientes para 2 personas:
400gr. de lomo de cerdo
1/2 pimiento verde
1/2 pimiento rojo
1/2 pimiento amarillo
1 cebolla
1 zanahoria
1 lata de piña en su jugo (de las pequeñas)

Para la salsa agridulce:
El zumo de la piña (unos 100-125 ml)
1 chucharada sopera de miel
2 cucharadas soperas de salsa de soja
30gr. de ketchup (yo utilizo Heinz)
1 cucharada de vinagre balsámico de módena
1 cucharilla (de café) de maizena ( y un poco de agua para disolverla)
1 pellizco de sal y/o de azúcar, para corregir si fuera necesario (irá en función de la cantidad de zumo que hayáis obtenido)

Para el rebozado:
Harina blanca
1 huevo
sal y pimienta
abundante aceite para freír

Antes de empezar os quiero comentar un par de cosas. Los ingredientes son por supuesto a vuestro gusto, podéis añadir o quitar las verduras que queráis, aunque yo diría que estas son las más adecuadas.

Respecto a la salsa, os he de confesar que yo prefiero el vinagre balsámico por muchos motivos, pero estas recetas se elaboran con vinagre blanco, incluso en mayor cantidad que la que yo utilizo. Si vosotros lo preferís podéis sustituirlo perfectamente y la salsa también os quedará menos oscura.

Cortad la cebolla y los pimientos en piezas cuadradas de tamaño similar.
Las cebollas simplemente la cortáis en cuartos.

Haced lo mismo con la zanahoria. Primero cortadla longitudinalmente y luego en piezas del mismo tamaño que el resto de las verduras.
Haced lo propio con la piña. Escurridla bien.
Recordad hacerlo con piña conservada en su jugo, no utilicéis almíbar que destrozaría literalmente la salsa.
Si disponéis de piña natural mejor, pero no es imprescindible para esta receta. 

En cuanto a la carne, cualquier parte magra del cerdo os irá estupendamente bien. Pero no es necesario que compréis la más cara.

En esta ocasión compré una pieza de lomo entera, o de chuleta sin hueso. Sale más tierna y jugosa precisamente por eso, porque tiene grasa.

Pero debéis procurar, si compráis la misma pieza, quitarle todo rastro de grasa o nervios que sería desagradable de encontrar.

Cortad el lomo en dados de manera que una vez limpios os queden de unos 2cm- 2.5cm.

Una vez tengáis listas las verduras y la carne proceded a preparar la salsa.

Mezclad todos los ingredientes en un cazo, el zumo de piña, el ketchup, la miel, la salsa de soja y el vinagre y llevadlos al fuego.

Dejad que hierva unos 5 minutos y a continuación agregad la maizena disuelta en un poquito de agua.

Probad y rectificad de sal o azúcar, si lo consideráis necesario. Normalmente suelo rectificar con un poquito de sal, porque la cantidad de zumo no es siempre exactamente la misma, pero probadla y hacedlo a vuestro gusto.

Lo que veis al fondo es pan chino cociéndose al vapor. Al final os dejo un link a la receta por si queréis probarlo.

Si tenéis wok ponedlo al fuego con unas gotitas de aceite, o bien de girasol o de oliva muy, muy suave.

La grandeza del diseño de este utensilio es que puede cocinar distintos ingredientes con diferentes tiempos de cocción, todos a la vez, reservando caliente lo que queda en los laterales y salteando con fuerza lo que reposa en el centro. Con lo que os evitáis tener que ir reservando o haciendo tandas. Y por descontado, aprovechando todos los sabores. En una cocina donde se require salteados rápidos y breves, es ideal.

Así que una vez he salteado un poquito la zanahoria en solitario, porque es la verdura que a mi gusto necesita algo más de cocción, la he reservado en un lateral y he procedido a añadir el resto de verduras que he salteado conjuntamente.

La cocción debe hacerse a fuego vivo, rápido y con movimientos constantes. El tiempo dependerá de lo crujientes que os gusten las verduras. Pero por lo general siempre es breve.

La piña no me gusta saltearla, porque luego, en el plato, queda oscura, blanda y poco atractiva. Por lo que espero a tener las verduras al punto deseado para añadirla.

Acto seguido añadid la salsa, mezclad bien y reservad caliente.

Salpimentad y enharinad finamente los dados de lomo. Si es necesario ayudaos de un colador para eliminar el exceso de harina. Pasadlo por huevo batido.
También podéis hacer una tempura, el rebozado hacedlo a vuestra elección.

Freídlo en abundante aceite, bien caliente.
Lo escurrís tan bien como os sea posible y lo depositais sobre papel absorbente.

Como nos gusta encontrar el crujiente del rebozado, me limito a incorporar el lomo junto a la verdura, ya fuera del fuego, y mezclarlo ligeramente dentro de wok.

Se sirve bien caliente y listos!

Seguramente la salsa, a medida que vayáis familiarizándoos con ella, os gustará irla modificando a vuestro gusto. Como os he comentado la mía peca de suavidad en el vinagre, sin embargo lleva la cantidad que a mi gusto es correcta y no hay ningún ingrediente que destaque especialmente sobre los demás. La última vez que mi marido pidió este plato en el wok me llegaba el olor a vinagre, exageradamente intenso, no es que me disguste porque me encanta el vinagre, pero hasta para mí era excesivo y percibir esa intensidad a través del olfato suele ser desagradable.

Por lo demás, lo normal es corregir con un poquito de sal o de azúcar en función de la cantidad de zumo de piña que os haya resultado. Ya os he comentado que casi siempre rectifico con un pellizco de sal, pero recién hecha, o en caliente y probándola tal cual, es preferible no rectificarla demasiado. Esta salsa gana mucho con el tiempo de reposo, se sientan los sabores y está exquisita. Para mi gusto, una vez mezclada con los ingredientes del plato, resulta muy acertada. Aquí el mejor de los trucos será que la adaptéis a vuestro gusto personal. Esta salsa agridulce será una buena base para que os iniciéis y exploréis posibilidades incorporando vuestro toque personal, si es todavía no conocéis ninguna.


ARROZ TRES DELICIAS – DIRECTO AL PALADAR

Ingredientes para 3 personas

· 400 g de arroz largo oriental (basmati, jazmín, thai, etc), 1 zanahoria, 150 gramos de gambas peladas, 75 gramos de guisantes, 2 lonchas de jamón de York cortado un poco más grueso que lo normal, 2 huevos, 2 cucharadas de salsa de soja, 1 cucharadita de azúcar, 4 cucharadas de aceite de oliva y sal
Cómo hacer arroz tres delicias

Cortamos la zanahoria en dados pequeños y la ponemos a cocer en una cacerola con agua y un poco de sal. Abrimos la lata de guisantes. Batimos los huevos con la sal y una cucharadita de azúcar y preparamos una tortilla francesa en dos tandas, usando una sartén bien caliente con media cucharada de aceite de oliva. La tortilla debe quedarnos bastante fina, tipo crêpe.

Mientras tanto, ponemos en otro cazo con agua de sal el arroz largo tipo basmati o thai a cocer. En unos diez minutos estará listo, dependiendo de la variedad, momento en el que lo escurrimos y reservamos. Mientras cuece, cortamos el jamón de York en taquitos.

Salteamos las gambas ligeramente en una sartén amplia con el resto del aceite de oliva, y como ya tenemos todos los ingredientes listos, procedemos a preparar el plato de arroz tres delicias. Para ello, añadimos el arroz bien escurrido a la sartén, y sazonamos con las cucharadas de salsa de soja.

Una vez bien salteado, agregamos los demás ingredientes, salteando para que todos se mezclen en la sartén y una vez listos lo pasamos a una fuente y lo servimos inmediatamente, muy caliente con un poco de salsa de soja aparte para que quien quiera pueda añadirla a su gusto.
Tiempo de elaboración | 20 minutos
Dificultad | Muy fácil
Degustación

El arroz chino tres delicias, o arroz frito chino es una excelente guarnición tanto para platos orientales como para todo tipo de preparaciones de pescados o mariscos. Si lo quieres para una guarnición de plato de carne, haz la misma receta pero sin utilizar las gambas.

Kartoffelpuffer - TORTITAS DE PATATA - DIRECTO AL PALADAR

Estas si que las hemos probado

y están riquísimas (me recuerdan mogollón a unas que nos pusieron en el Mc Donald del aeropuerto de Londres, para el desayuno... mmmm qué recuerdos)


Ingredientes para 6 personas

1 kg de patata, 200 g de cebolla, 1 huevo "M", 1 cucharadita de sal, 1/2 cucharadita de sal de apio (opcional), un manojo de perejil fresco o 2 cucharadas de perejil seco, 2 cucharadas colmadas de harina de trigo y aceite de girasol.

Pelamos las patatas, las lavamos y las rallamos con un rallador grueso. Pelamos la cebolla y la rallamos con el mismo rallador. Mezclamos ambas y les agregamos el huevo, la sal, la sal de apio (en caso de usarla), el perejil (previamente lavado y picado, en caso de ser fresco) y la harina de trigo. Removemos bien hasta obtener una mezcla homogénea.

Cubrimos la base de una sartén amplia con un dedo de aceite de girasol y lo calentamos. Tomamos cucharadas de nuestra mezcla de patata, las depositamos en la sartén y las aplastamos con el reverso de la cuchara para que queden de igual grosor por toda la superficie. Freímos a fuego mediohasta que los bordes adquieran un todo dorado.


Alcanzado ese punto, volteamos y freímos por la otra cara. Las kartoffelpuffer estarán listas para ser retiradas de la sartén cuando adquieran un tono dorado por ambas caras. Entonces, las colocamos sobre un colador o sobre papel de cocina absorbente, para escurrir el exceso de aceite. Servimos inmediatamente.

Tiempo de elaboración | 45 minutos
Dificultad | Fácil

Degustación

Tradicionalmente, las kartoffelpuffer o tortitas alemanas de patata se comen solas y acompañadas de compota de manzana. No necesitan de más compañía, pues están deliciosas tal cual. No obstante, se pueden servir como guarnición de carnes y aves: salchichas, estofados, carrilleras, pollo asado o lo que más nos guste. Todo un acierto

MEJILLONES EN ESCABECHE - COCINANDO ENTRE OLIVOS

Ingredientes

o 2 kilos de mejillones

o 3 dientes de ajo

o 2 cebolletas o 1 puerro

o 1 chorreón de vino blanco

o 1/2 vaso aceite de oliva virgen extra

o 1 cucharada de pimienta en grano

o 2 hojas de laurel

o 1 cucharadita de pimentón de la vera (picante)

o 1 vaso de vinagre

o 1 vaso de caldo de los mejillones

Limpiamos los mejillones retirando las barbas, el biso con un cuchillo raspando además las adherencias de las conchas. Los que estén rotos o abiertos, tiradlos.

Los ponemos en una cazuela con un chorreón de vino blanco y conforme comiencen a abrirse los vamos sacando

Sacamos los mejillones y desechamos la concha

Colamos el caldo y reservamos

Cortamos la cebolleta en tiras y pelamos los dientes de ajo, los ponemos en una cazuela con aceite de oliva virgen extra.

Añadimos la pimienta

Cocinamos unos minutos a fuego suave

Incorporamos el laurel, el pimentón

Mezclamos

Añadimos el vinagre y el caldo de los mejillones

Y dejamos en el fuego


Hasta que comience a hervir, lo dejamos unos minutos, apagamos y esperamos que se enfríe

Ponemos los mejillones en un recipiente

Vertemos todo sobre los mejillones

Y al día siguiente ya se pueden tomar, pero si pasan dos o tres estarán mejor, eso si...sacadlos un rato del frigorífico para que estén a temperatura ambiente y podamos disfrutar mejor de su sabor.


Listos para tomar

Eran unos mejillones fantásticos como me dijo la pescadera, de un tamaño considerable y cocinados así la textura es perfecta, nada que envidiar a unos mejillones en escabeche de lata, y como os decía al principio a nosotros nos encanta tomarnos la cebolleta también.



BACALAO CON NATAS - DIRECTO AL PALADAR

Desde que estuvimos en Lisboa, en agosto del 2014 recuerdo esta receta con una mezcla de melancolía y ansia por encontrar una que se le pareciera lo más posible.

Al final, en una de mis páginas favoritas, encontré la que más se adapta (o eso creo, que aún no la he probado)

Ingredientes para 6 personas
400 g de bacalao desalado entero o en migas, 5 patatas, 1/2 cebolla, 20 gr de mantequilla, 1 cucharada de harina, 1/2 litro de leche, aceite de oliva y sal

Cómo hacer la receta portuguesa de bacalhau con natas

Partimos de bacalao desalado tras el clásico proceso de dejarlo en agua unas 36 horas dentro de la nevera y cambiando el agua cada 12 horas. Una vez el bacalao está en su punto, cortaremos pequeñas tiras, con las manos o con un cuchillo afilado. Las reservamos en agua. (También podéis usar migas de bacalao troceándolas cuando estén desaladas).

Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas como cuando vamos a preparar una tortilla de patata y las freímos ligeramente sin que se lleguen a dorar. Luego terminarán de hacerse en el horno. Colocamos la mitad de las patatas una vez fritas y escurridas en la base de una fuente amplia.
Picamos en juliana media cebolla y mientras se pocha a fuego lento, cocemos los trozos del bacalao en la leche durante dos o tres minutos. Después ponemos las tiras de bacalao con la cebolla y las salteamos juntas. Colocamos el bacalao y la cebolla sobre las patatas en la fuente.

Preparamos una bechamel muy ligera con la mantequilla, la harina y la leche en que cocimos el bacalao, añadiendo más leche si fuera necesario. Una vez comience a espesar, lo añadimos a la fuente dejando que se reparta entre los huecos y que cubra las patatas.
Horneamos a 190º durante quince minutos y después gratinamos hasta que se tueste la capa superior. Servimos advirtiendo a los comensales que puede estar muy caliente ya que las patatas conservan mucho la temperatura.

Tiempo de elaboración | 45 minutos
Dificultad | Media

Degustación

La receta del bacalhau com natas o bacalao con natas es una de las formas más ricas para disfrutar de este pescado tan rico que podemos disfrutar todo el año, en especial en la Semana Santa. Esta preparación portuguesa es idónea para introducir a los niños en el consumo de este pescado pues tanto la bechamel como las patatas hacen que la prueben encantados.


TRES RECETAS DE COSTILLAS DE "DIRECTO AL PALADAR"

RECETAS DE DIRECTO AL PALADAR

COSTILLAS A LA MIEL SIN HORNO:


Ingredientes para 2 personas
1 costillar de cerdo, 1 cucharada de salsa de soja, 4 cucharadas de miel, 4 cucharadas de ketchup, aceite, sal, pimienta y un poco de coñac.
Cómo hacer costillas a la miel sin horno
Empezamos separando las costillas del costillar, salpimentándolas y poniéndolas adorar en la olla exprés con un chorrito de aceite. Cuando se hayan dorado, añadimos un chorretón de coñac y dejamos que se evapore un par de minutos.

Mientras tanto, preparamos la salsa mezclando la soja con la miel y el ketchup. Añadimos la salsa a las costillas, removemos bien y cerramos la olla. En cuanto a empiece a silbar bajamos un poco el fuego y dejamos cocer durante cinco minutos. Servimos caliente con un poco de romero y tomillo.

Tiempo de elaboración | 15 minutos
Dificultad | Fácil
Degustación
Esta receta rápida de costillas a la miel sin horno está casi tan buena como la versión habitual, y es muchísimo más rápida y sencilla. Las costillas quedan muy tiernas y jugosas, e incluso la salsa se carameliza para darle ese toque dulzón tan delicioso.

La ventaja de esta receta de costillas a la miel sin horno es que se prepara extremadamente rápido, en unos 15 minutos, de forma muy sencilla y sin apenas manchar, ya que utilizamos la olla exprés.

COSTILLAS A LA BARBACOA EN CINCO MINUTOS:
Ingredientes para 2-3 personas
800g de costillas de cerdo, 6 cucharadas de salsa barbacoa, 2 cucharadas de miel, 1 cucharada de salsa de soja, aceite, sal, pimienta, tomillo y orégano
Cómo hacer costillas a la barbacoa en cinco minutos
Comenzamos troceando las costillas (o se las pedimos troceadas al carnicero) y las ponemos a dorar en la olla exprés con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta.
Mientras las costillas se doran, preparamos la salsa mezclando la salsa barbacoa, la miel y la soja. Después, añadimos la salsa a las costillas, removiendo bien hasta que se impregnen.
Finalmente, cerramos la olla exprés (seleccionando la opción de mayor potencia si existiera) y dejamos cocer cinco minutos desde el momento en el que comience a silbar. Dejamos salir el vapor y servimos caliente con un poco de romero y tomillo.
Tiempo de elaboración | 15 minutos
Dificultad | Fácil
Degustación:
Las costillas a la barbacoa en olla exprés están casi tan buenas como las originales. No se caramelizan tanto, pero a cambio están más jugosas, con un montón de salsa para hacerlas sencillamente deliciosas.
COSTILLAS AL CHOCOLATE:

 la receta original, publicada por Hotel Chocolat en The Telegraph, era muy larga y complicada, pues implicaba varias horas en el horno y luego un cuidado proceso de glaseado con el grill, he decidido simplificarla un poco, pero ya os adelanto que el resultado sigue siendo espectacular.
Ingredientes para 2 personas
·         1 costillar de cerdo (1/2kg aprox.), 20ml de vinagre balsámico, 20ml de salsa de soja, 25g de chocolate negro de repostería, 35g de miel de romero, 20g de azúcar moreno, 1 diente de ajo y una ramita de romero.
Cómo hacer costillas de cerdo caramelizadas al chocolate
Empezamos preparando la salsa. En un cuenco mezclamos el vinagre, la miel de romero, la salsa de soja y el azúcar moreno. Si la miel no es de romero no pasa nada, pero ayuda a potenciar el sabor. Una vez hemos mezclado bien, añadimos el diente de ajo pelado y la ramita de romero y dejamos infusionar al menos una hora a temperatura ambiente.
Transcurrido ese tiempo, vertemos la salsa en un cazo o sartén antiadherente y calentamos a fuego muy suave, dejando que se espese lentamente. Luegoincorporamos el chocolate rallado o desmenuzado hasta que se derrita, apagamos el fuego y reservamos.
Por otro lado separamos cada costilla del costillar con ayuda de un cuchillo afilado. Las salamos ligeramente y las colocamos en una bandeja o un cuenco para horno en el que quepan más bien justitas. Añadimos la salsa, asegurándonos de que se impregnen bien, tapamos con papel de aluminio y horneamos durante una hora con el horno a 175ºC.
Transcurrido ese tiempo, sacamos las costillas del horno y les damos la vuelta. Subimos la temperatura a 225ºC y horneamos durante 20 minutos más, dándoles de nuevo la vuelta a los 10 minutos. Si veis que se secan demasiado, podéis volver a taparlas con papel de aluminio. Finalmente, sacamos del horno y servimos pintando las costillas con un poco de la salsa que quedará en la bandeja.
Tiempo de elaboración | 3 horas
Dificultad | Media
Degustación
Estas costillas de cerdo caramelizadas con chocolate son una auténtica delicatessen. El vinagre y el romero le aportan un toque balsámico que contrarresta el dulzor de la miel y el chocolate, creando un pequeño universo de sabores en la boca a cada bocado.