En esta ocasión visitamos la zona de Embajadores, comenzando en la propia plaza.
Isabel y yo esperamos en la acera de la Tabacalera, y resulta que la quedada era… en la esquina totalmente opuesta de la plaza... habíamos llegado allí con un cuarto de hora de antelación y pasamos a llegar las últimas, con el cachondeíto general... y el nuestro propio.
Al lío:
En el año 1438 hubo una epidemia grave de peste, cerca del arrabal.
Madrid aun no era la capital y Juan II de Castilla recibe a los embajadores de varios lugares y para ello celebra unos festejos.
Cuando llega la peste, él huye a Toledo y a los embajadores se les evacúa por el Portillo.
Cuando todo termina, y como les había gustado la zona, por aquí se construyeron muchos palacetes (en la actualidad no queda nada de esto).
El verano en Madrid, Agua corriente - ilustración de Ventura Álvarez Sala (1898)
imagen de Wikipedia
La casa de baños que está en la plaza es original, data de la segunda década del siglo XX, aunque está restaurada en el siglo XX.
En el pasado hubo varias casas de baños en la capital, ahora solamente queda una en la calle Bravo Murillo y esta de Embajadores.
La primera documentada estuvo en la calle Segovia, durante los siglos XIII o XIV. Y otra en la plaza de los Caños del Peral, en la actual plaza de Oriente.
Realmente, lo distintivo de esta de Embajadores, es que es la primera casa de baños pública. Esta zona estaba llena de corralas, cuyas viviendas en su mayoría carecían de baños, con lo cual tiene todo el sentido.
Nuestra primera parada es en la calle Bernardino Obregón, y se trata de un edificio que acogió la antigua Fábrica de Maderas. Su construcción data de 1904 y es de estilo neomudéjar.
Había algunas otras fábricas de madera, como la de la calle de la Madera en el barrio de Malasaña (muy apropiado, ¿verdad?)
Esta zona es absolutamente industrial, y junto con esta fábrica, tenemos la Tabacalera, almacenes varios, la Fabrica de galletas Pacisa, la Fábrica de Gas... un montón.
El edificio fue ampliado a principios de los 90, con bastante acierto, creo. Dejan la fachada antigua en la parte inferior, y la construcción superior mucho más moderna, pero con unos colores y materiales que no desentonan del todo.
antigua fábrica de maderas - imagen de Ediciones la Librería
Nos asomamos un momento a la calle principal, que es la Ronda de Valencia.
DE MI PROPIO BLOG (entrada de octubre 2020)
La ronda cambia de nombre, de Ronda de Atocha a Ronda de Valencia.
Y nos encontramos con otro edificio singular: la Casa Encendida.
Ahora es un centro cultural donde se realizan exposiciones vanguardistas, cursos y talleres. Hay cine, teatro y un evento musical en colaboración con Radio 3, emisora nada comercial, que tiene una visión mucho más alternativa o independiente del panorama musical.
El edificio está diseñado en el 1.910 por Fernando Arbós y Tremanti.
En un principio albergó una entidad bancaria, así que se le conocía como "El Monte" o Casa de Empeños" (recordemos que la sede principal estaba en el palacio de las Alhajas, en la misma plaza del Monasterio de las Descalzas Reales, como ya vimos en el curso pasado)
Realizada con ladrillo visto a dos colores y granito, posee dos Torreones imitando a los palacios del XVIII.
Parece ser que debe su nombre gracias a un libro de Luis Rosales en el que nombra al alma del artista: algo así como "El alma iluminada como una casa encendida y sin zonas oscuras"... muy bonito.
Volvemos a bajar por la calle Bernardino Obregón y pasamos por la puerta de la Sala Caracol. Lugar emblemático de conciertos y actuaciones, sobre todo en los 80 y 90, y empeñado también un poco por las drogas y ciertos tumultos en la zona.
Por esta calle de Bernardino Obregón, bajamos hasta que atravesamos Sebastián Herrera y nos encontramos con otra joyita, digna de parada y explicación.
Se trata del Laboratorio Central de Fabricación de Medicamentos (militar)
fotografía de nuestra anterior visita en la zona
Vista del Museo desde la calle Embajadores
Fue el Museo de Farmacia Militar entre 1928 a 2015 ahora este museo está en la Base Militar de San Pedro en Colmenar Viejo. Se utiliza mucho para rodar pelis y series.
DE MI PROPIO BLOG:
Se trata de unas naves (una manzana entera en realidad) donde se elaboraban todos los medicamentos que usaban los militares.
vista aérea del enorme conjunto - imagen de Google Maps
En el siglo XIX, se empezaron a dar cuenta de lo importantes que eran los medicamentos para ganar una guerra o hacer frente a las enfermedades o pandemias.
Los soldados les rendían más si duraban más...
Y fue nuestra querida Isabel la Católica la primera en el mundo en usar los hospitales de campaña (así de visionaria era la tía) Aunque en realidad fueron los romanos (Cesar Augusto) los primeros en poner al servicio de la guerra los conocimientos médicos.
El edificio no es neomudéjar, como todos los que se hacían en estos momentos, pero resulta igualmente bonito con su fachada clásica y su preciosa cúpula-chapitel abullonada.
Disponía de un impresionante museo, que ahora se puede visitar en las nuevas instalaciones de Colmenar Viejo.
Y tiene instalaciones del Instituto Nacional de Artes Escénicas, aunque se espera que se pueda utilizar culturalmente muchísimo más en un futuro no muy lejano.
EDITO: estamos en mayo del 2023 (casi tres años más tarde) y esto sigue igual, sin ninguna gana de hacer nada.
Pasamos por un lugar que fue mítico en la zona.
Si te gustan los entresijos y las gallinejas seguro que conocías este lugar, que ha cerrado hace bien poco (en el 2022).
En el número 84 de la calle Embajadores estaba este mítico local.
imagen de El Independiente
Una pena como van desapareciendo todos estos negocios antiguos y típicos. Poco podemos hacer, la verdad.
Y muy muy cerca, un lugar emblemático: El Casino de la Reina, entramos por la Ronda de Toledo.
DE MI PROPIO BLOG:
Aquí está el llamado Casino de la Reina, que es un Sitio real.
Fernando VII tuvo cuatro esposas. Las tres primeras murieron sin descendencia aunque, tuvieron embarazos que acaban en abortos. Cuando se casa con María Cristina de Borbón es cuando por fin tiene a sus dos hijas, Isabel y Luisa Fernanda.
Fernando VII tuvo cuatro esposas. Las tres primeras murieron sin descendencia aunque, tuvieron embarazos que acaban en abortos. Cuando se casa con María Cristina de Borbón es cuando por fin tiene a sus dos hijas, Isabel y Luisa Fernanda.
El Ayuntamiento de Madrid, le regala esta casa de recreo o de campo a la segunda esposa, Isabel se Braganza. En su primer embarazo Madrid le dona estos terrenos, emocionados ante la idea de tener al fin sucesor real. Pero la pobre lo disfruta muy poco, ya que falleció dos años después... (y sin descendencia) Aunque que le dio tiempo a decorarlo a su gusto.
Los terrenos son de la llamada Huerta de Romero, 13 fanegas en total. (Y es que estos terrenos pertenecieron en su origen a los clérigos de la cercana iglesia de San Cayetano. Y durante la ocupación francesa este solar les fue arrebatado a los religiosos y terminó en manos de Manuel Romero, ministro de Justicia de José Bonaparte)
Los terrenos son de la llamada Huerta de Romero, 13 fanegas en total. (Y es que estos terrenos pertenecieron en su origen a los clérigos de la cercana iglesia de San Cayetano. Y durante la ocupación francesa este solar les fue arrebatado a los religiosos y terminó en manos de Manuel Romero, ministro de Justicia de José Bonaparte)
Ahora se la conoce como el Casino de la reina.
La palabra casino es de origen italiano, pero en esta ocasión, hace referencia a las casas agrícolas y de descanso, no a las de juego.
Durante el reinado de Isabel II se donó de nuevo al Estado y por él fueron desfilando instituciones de todo ámbito. Por ejemplo, albergó el Museo Arqueológico Nacional hasta 1895, hasta que se trasladó a su sede actual (se les quedó pequeño en seguida)
También pasó por aquí el Instituto Cervantes, la Escuela de Veterinaria o el Asilo de las Cigarreras.
El palacete, ahora reconstruido, es obra de Antonio López Aguado. Y si no lo conocéis, recomiendo visita, porque es muy chulo.
Interviene también Francisco Jareño (autor también del conocido hospital del Niño Jesús o la Biblioteca nacional)
Interviene también Francisco Jareño (autor también del conocido hospital del Niño Jesús o la Biblioteca nacional)
El Casino en su inauguración y en la actualidad
En el palacete faltan unas esculturas de mármol que flanqueaban las escaleras. Están reubicadas por Madrid, claro.
La verja, que formaba parte de la cerca de Felipe IV, se acabó llevando al parque del Retiro y una de las portadas también.
Resulta sumamente curioso ver como todos estos elementos del mobiliario urbano se van moviendo por la ciudad a voluntad.
La verja, que formaba parte de la cerca de Felipe IV, se acabó llevando al parque del Retiro y una de las portadas también.
Resulta sumamente curioso ver como todos estos elementos del mobiliario urbano se van moviendo por la ciudad a voluntad.
La puerta cuando estaba en el Casino y luego en el Retiro.
Finalmente fue totalmente desmantelado, y por ejemplo la decoración de los frescos se llevó al Museo del Prado y los tapices y los muebles al Palacio Real.
Los Jardines eran de inspiración francesa, al gusto de la reina.
Los Jardines eran de inspiración francesa, al gusto de la reina.
Había cantidad de construcciones en esta zona, (incluso había un invernadero) pero ahora solo queda el llamado Quiosco de la Reina y el palacete.
En estos momentos son dependencias del ayuntamiento y muy cerca han construido un centro de mayores.
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Nos cuenta Javi varias cosas interesantes, como por ejemplo que durante y tiempo fue Museo Arqueológico y que estaba decorado con pinturas de Vicente López.
Dichas pinturas están actualmente en la sala 39 del Museo del Prado (nota mental para visitarlo, por curiosidad)
Muy cerca, está el Instituto Cervantes, que parece ser que fue un importante centro veterinario en su momento.
Nos vamos ahora hacia el cercano parque del Gasómetro.
El único vestigio que queda de la fábrica antigua de gas, es la chimenea, muy necesaria para ser utilizada en las fraguas. Es del año 1848.
El ayuntamiento cede unos terrenos, y se tira parte de la cerca de Felipe IV para construir la fábrica de gas.
Son los primeros pasos del alumbrado público. Concretamente, las primeras farolas se colocan en el Paseo del Prado.
En el año 1904 se inaugura el Real Aéreo Club de Madrid, donde se empiezan a celebrar competiciones de globos aerostáticos, esta zona era todo campo.
Volaban hacia el barrio de Hortaleza, hacia San Sebastián de los Reyes...
En la foto que sigue, se ve la cúpula de las Escuelas Pías de San Fernando y es sumamente curiosa.
Cuesta imaginarse un Madrid así, ¿verdad?
competición en el Gasómetro, al fondo se ve la cúpula de las Escuelas Pías de San Fernando
imagen de Historias Matritenses
DE MI PROPIO BLOG:
El material que se usaba era la hulla y una resina muy contaminante.
Las farolas en la época de Fernando VII eran gas de hidrógeno
Al llegar la electricidad en 1.847 la sociedad cambia, la iluminación nocturna y la calefacción hace que todo de un giro importante, la vida por la noche se anima, en las calles hay más vida, el teatro y otros espectáculos empiezan a ser cada vez más importantes para los ciudadanos.
Es un gran cambio.
Claro que, siempre que hay un avance, hay también un retroceso por ciertos sectores de la sociedad.
Hay grupos de personas que se ponen en contra, aduciendo que se abren las entrañas de la ciudad, o bien las empresas que se dedican al petróleo y el aceite protestan, puesto que ven peligrar sus negocios, al no necesitar estos materiales para iluminar. Se creía que caería la industria del aceite, entre otras.
el único vestigio que queda de la Fábrica de Gas: la chimenea
Bajamos por la calle del Gasómetro, hasta atravesar el Paseo de las Acacias y continuamos hasta el Paseo del Juan Antonio Vallejo-Nájera Botas.
Como curiosidad, parece ser que en esta zona estuvo el llamado Campo del Gas, un campo de fútbol regional donde se montaba un ring y se celebraban campeonatos de boxeo y lucha, muy típicos de los años 60.
Seguro que muchos aficionados lo conocen, un compi del grupo, Julián, lo recordaba perfectamente.
Campo del Gas - imagen de entredosamores.es
Este paseo de Juan Antonio Vallejo-Nájera es el hilo conductor de la zona denominada "pasillo verde", zona de viviendas que se edificaron en los años 90 del siglo XX y que regeneró esta zona industrial con bulevares y calles.
Ya en los 80 se empiezan a soterrar las vías del tren que circulaba uniendo las estaciones de Príncipe Pío y Atocha.
Calle del Ferrocarril cuando aún pasaban las vías del tren - imagen de entredosamores.es
Realmente esta zona ya se había intentado urbanizar desde el siglo XIX, pero el terreno no se prestaba a ello y no es hasta finales del XX cuando este proyecto se completa.
En esta zona se encontraba también la antigua estación de Peñuelas, que se situaba entre los Paseos de Yeserías y el de la Esperanza.
imagen de Wikipedia
imagen de Wikipedia
En torno a la estación se abrieron multitud de talleres y almacenes, que convivían con multitud de infraviviendas (chabolas y casas muy precarias). La zona se fue degradando cada vez más, hasta que en la década de los 80 del siglo XX fueron desmanteladas del todo.
En su lugar se creó el Parque de las Peñuelas.
zona de chabolas en torno a la estación de Peñuelas - imagen de entredosamores.es
En una época anterior estaba el conocido como Barrio de las Injurias, que salió en la conversación de la visita a la zona.
Situado cerca de la actual estación de Pirámides, casi ya en el rio y Puente de Toledo. Lugar de obreros y pobres de solemnidad, pagaban al casero un alquiler diario por las casuchas.
En 1906 el Ayuntamiento decidió hacerlo desaparecer, pero finalmente no tuvieron que intervenir, ya que unas lluvias torrenciales destruyeron todo.
Pío Baroja o Galdós lo nombran en sus obras.
Barrio de las Injurias - imagen de entredosamores.es
Para terminar la tarde llegamos a la Parroquia de Nuestra Señora de Europa.
Tiene poco más de 20 años de antigüedad, y la verdad es que a mí particularmente me parece ... fea.
Lo más interesante es la relación que guarda con la masonería... si, si, con los masones.
Está situada en pleno camino iniciático masón en Madrid.
Esta moderna iglesia tiene una cosa más curiosísima, y es, que en uno de los lados de la fachada, tenemos un "cuadrado mágico", una composición numérica que tiene la peculiaridad de sumar siempre 33, y da igual cómo lo sumes, y de qué lado a qué lado... siempre da 33.
Muy cerca de esta iglesia, tenemos el parque de las Peñuelas, donde estaban la estación y el barrio de las chabolas.
Hay una escultura masónica que refleja el tema de los "sólidos platónicos".
Quedan reflejados los cuerpos geométricos siguientes: el tetraedro, el cubo o hexaedro, el octaedro, el dodecaedro y el icosaedro. Todos comparten las siguientes propiedades: todas las caras son polígonos regulares iguales.
Estos cuerpos geométricos se asocian a los elementos de la Naturaleza:
OCTAEDRO:
Ocho caras de triángulos equiláteros. Asociado con el aire
ICOSAEDRO
Veinte caras de triángulos equiláteros. Asociado con el agua
TETAEDRO:
Cuatro caras de triángulos equiláteros. Asociado con el fuego
HEXAEDRO:
Seis Caras de cuadrados. Asociado con la tierra
DODECAEDRO
Doce caras de pentágonos regulares. Asociado con el quinto elemento el Cosmo, el Éter, la Creación.
En fin, toda una especie de filosofía o ideario raro, que no termino de entender...
Si tenéis una curiosidad tan grande como la mía, os dejo esta increíble entrada, donde cuentan extensamente todo, todito:
la escultura en cuestión con las figuras geométricas y el parque al fondo
Buena cervecita, buenas tapas. Muy chulo.
Y además vimos a un actor de los de toda la vida, Manuel Galiana, que estaba por allí tomándose algo, como nosotras. Qué majo.
Como ha sido mi cumple ayer, Isabel me tiene preparada una sorpresa: un puzzle maravilloso del Plano de Texeira de Madrid.
Ole.
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