sábado, 11 de febrero de 2023

CONOCER MADRID 5 - EL BARRIO DE LAVAPIÉS - 18 ENERO 2023

Sigo con el retraso en las entradas, pero yo, sigo...

Hoy vamos al barrio más castizo de Madrid, el barrio de los Manolos, los chisperos y los chulapos.
Ya hemos estado en alguna que otra ocasión, pero seguro que aprendemos cosas nuevas.

Tradicionalmente se cree que la judería estaba por esta zona. Se bautizan muchos niños con nombre judío (Manuel - Manolo) para escapar de la persecución. Por eso el apelativo de Manolos y Manolas...
Aunque en principio, la judería estaría más bien en la zona del alcázar.

Empezamos nuestra ruta en la Calle de la Cabeza, sobre la cual hay una leyenda tremenda y bastante increíble.
Resulta que en esta calle vivía un sacerdote que fue degollado por su criado, que huyó con todos sus bienes a Portugal. El crimen iba a quedar impune, pero el criado, chulo él, volvió al escenario del crimen para vivir en la casa.
Un buen día compró una cabeza de carnero para comer, y la envolvió en una capa. Pero un alguacil vio el rastro de sangre que iba dejando y le paró.
El criado le explicó lo que llevaba, pero la sorpresa de los dos fue mayúscula, cuando, al abrir la tela, apareció la cabeza del clérigo degollado.
Le culparon de la muerte y le ejecutaron en la Plaza Mayor, y Felipe III mandó colocar una cabeza de piedra en la casa del cura para que no se olvidara el crimen y su castigo.

De todos modos, nos cuenta Javi que puede ser simplemente un cuento pasado de boca en boca para disuadir a los criados que quisieran robar y matar a sus señores...

imagen propia de la morbosa imagen

En esta esquina que nos hemos parado, Lavapiés con Cabeza, está el Centro de Mayores de Antón Martín, que tiene unas interesantes cuevas en el sótano, que se usaban como celdas.
Javi nos dice que desde la pandemia está más complicado el acceso, pero cualquier día intento colarme...

En esta calle de Lavapiés, vivieron Jerónimo Velázquez e Inés de Osorio, padres de la famosa Elena Osorio, fijación del escritor Lope de Vega.
Lope de Vega estaba muy enamorado de Elena Osorio. Ellos se veían a ratos, pero parecía ser suficiente para ambos. Ella era muy lista, se termina casando con un hombre rico y Lope, muy enfadado y despechado, escribe pestes sobre ella y su familia.
Son tan graves e hirientes sus comentarios, que terminan expulsando a Lope cuatro años fuera de Castilla, y se marcha a Valencia.

Aquí se conocieron también Lope y Cervantes, donde empezaron a imprimir sus obras. Pero luego, tras una tremenda bronca, rompieron sus relaciones. Había un acuerdo, en el que iban a imprimir en una imprenta de esa calle todas las obras, pero dicho acuerdo, finalmente, se acaba rompiendo.

Otra curiosidad de estas calles:
En la calle de San Pedro Mártir con la de la Cabeza vivieron Picasso y Pepe Isbert (el actor de la voz peculiar, abuelo de Chencho y verdugo entre otras cosas)
Del buen Pepe no se dice nada, pero sin embargo, sobre Pablo hay una plaquita y un mural recordatorio, con dibujos que hacen un homenaje al gran pintor.

el mural conmemorativo de Pablo Picasso - imágenes propias

En la época en la que vivió aquí Picasso, sufrió una etapa "simpa", en la que el artista le echó bastante cara y dejó de pagar el alquiler. En esta época, él estaba estudiando en la Academia de San Fernando, y no disponía del dinero suficiente como para pagar todos sus gastos.
La casera, bastante harta, le expulsó de la casa, y tiró todos sus cuadros y bocetos. (Madre mía si ella hubiera sabido lo que iban a valer sus obras... se lo hubiera pensado un poco más...)

En la cercana calle de Mesón de Paredes 2 vivió José de Churriguera, y hay una placa del año 1991, que lo atestigua:

imagen de Memoria de Madrid


Con respecto al nombre de la calle, parece ser que en el XV se encontraba en la afueras, y que por ello estaba lleno de mesones y posadas, que acogían a la multitud de personas que se acercaban a la ciudad.

La calle también puede llamarse así por otra causa. Regentaba uno de los mesones Simón Miguel Paredes, en su local se servían unas famosas gallinejas, caldos de Arganda y aguardiente de Chinchón.

Hay una tercera versión: uno de los mesoneros era un hombre bastante celoso, y había practicado muchos agujeros en la pared, para poder vigilar a su esposa. (los hombres estúpidos existen desde que el mundo es mundo...) El nombre vendría dado por la obsesión por las paredes que tenía el hombre.

En Mesón de Paredes 13 nos encontramos con la taberna de Antonio Sánchez, del año 1787 y la más antigua sin reformar de Madrid (la última reforma es de 1830)


imagen propia

imagen propia

La taberna se llama así por el cosechero Antonio Sánchez y su hijo, el torero, que tiene el mismo nombre. (tomó la alternativa en 1922 de la mano de Ignacio Sánchez Mejías... al que Lorca y Miguel Hernández recordaron con belleza a la hora de su muerte)
En esta taberna se reunían amantes de la tauromaquia y también artistas y escritores como Zuloaga, Pío Baroja, Julio Camba o el Dr. Gregorio Marañón.
Aparece en un libro de Camilo José Cela, "Torerías", y Gloria Fuertes, por lo visto escribió allí parte de sus poemas.

Conserva azulejos originales y varias cabezas de toro disecadas... de principios del XX.
También hay unos frescos de toreros famosos, como Frascuelo y Lagartijo.
Mantiene la antigua instalación de luz de gas, un antiguo elevador para subir las viandas desde la planta inferior y una caja registradora de más de 120 años.

Parece ser que sus torrijas son muy famosas y el mismísimo Alfonso XIII y su familia, las solicitaban a diario para desayunar.
En el menú podemos degustar el rabo de toro y la olla gitana.

foto del grupo en la Taberna Sánchez - imagen de Isabel Tolosana


imagen de la barra - Isabel Tolosana


detalle de la barra - imagen de Isabel Tolosana


las especialidades de la casa (en un pasado no muy lejano) - imagen de Isabel Tolosana

   
vista general del local - imagen de Isabel Tolosana y mía propia


imagen de Isabel Tolosana

imagen de Isabel Tolosana

imagen propia


detalle del reloj y de las botellas de licores - imagen de Isabel Tolosana y mía propia

antigua máquina registradora - imagen propia

la entrada al local - imagen de Isabel Tolosana

Seguimos andando hasta la calle del Oso, es esa tan famosa que los vecinos decoran con mantones en las fiestas de San Cayetano.

imagen de Secretos de Madrid


En esta calle nació y vivió Pedro de Ribera, y que participó en la construcción de la cercana iglesia de San Cayetano, que en la tarde de hoy no visitamos.

Un poco más abajo, siguiendo por la calle de Mesón de Paredes, llegamos a la Plaza de Nelson Mandela. No hay ninguna escultura rindiendo homenaje sino un mural, que en el pasado sería bonito, pero que ahora está destrozado.
Se intuyen colores intensos como los de las camisas que solía llevar y la flor del ave del paraíso, que era su favorita.
Pongo unas fotos de la red, porque en la actualidad está tan mal que da pena.

imágenes del Ayuntamiento de Madrid

la preciosa flor del ave del paraíso - imagen de facilísimo

En esta plaza estaba el convento de Santa catalina de Sena, que con la desamortización desapareció.
Solo quedan unos sillares antiguos, que están en el suelo, como si fueran unos toscos bancos de piedra.
Por supuesto, podemos encontrarlo en el plano de Texeira:

imagen del plano de Texeira


En uno de los lados de la plaza, está la llamada Fuente de Cabestreros, de 1934, de la época de la Segunda República. Los cabestreros, como su nombre indica, conducían a los cabestros, con los que transportaban mercancías, aguas... Eran hombres fuertes y aguerridos, y como paraban en esta fuente, se empezó a correr el rumor de que beber de estas aguas transformaba a los hombres en "machotes ibéricos" …típico
Por cierto, este término no viene de la palabra cabestro-animal, sino de los ronzales, qué son las cuerdas de atar a las caballerías. Y curiosamente, aquí estaba instalado el gremio del cáñamo y las cuerdas.

Esta fuente surtía al barrio y al convento, y era bastante popular.
Llama la atención la inscripción de la placa "República Española. Ayuntamiento de Madrid"
Parece mentira que haya sobrevivido, la verdad.

fuente de Cabestreros - imagen propia

El siguiente punto de interés es la Plaza de Arturo Varea, cronista de la guerra civil. Una de sus novelas más interesantes: "La forja de un rebelde"

uno de los lados de la plaza - imagen propia

La plaza cambia de nombre con el gobierno de  Carmena. 
Anteriormente era la plaza de Agustín Lara, músico del que podemos ver la estatua en la misma plaza.
Es el autor de canciones tan conocidas como "Granada" o "Solamente una vez"... Autor , sobre todo de boleros, se le conocía también como "el flaco de oro"
Hace canciones de ciudades en las que nunca había estado … y eso tiene mucho mérito.

Agustín Lara - imágenes propias

Dominando el espacio, las Escuelas Pías de San Fernando. Edificadas sobre el solar del mercado del mismo nombre, fueron bombardeadas el 19 de julio.
Hoy en día, se pueden ver rehabilitadas de un modo un tanto peculiar y albergan parte de un centro asociado a la UNED y una biblioteca.

imagen propia

imagen de time out

La Orden de San José de Calasanz a la que pertenecían estas escuelas, hablaba de los derechos del niño ya en el siglo XVI. Esta institución hizo mucho por muchachos de la zona. Sobre todo hijos de las cercanas cigarreras. que en los momentos de más auge de la fábrica, llegaron a ser unas 6.000.
Son los famosos escolapios (escuelas pías...)
Este centro parece ser que fue de los primeros en ofrecer una enseñanza para personas sordas, en los años 30 del XX.
Fue seriamente dañado por los franceses en 1808, y hacia el 1830 se restaura gracias al trabajo del padre Losada. Sin embargo, durante la guerra civil se daña nuevamente y queda prácticamente en ruinas hasta 1998 en el que pasa a ser una de las principales sedes de la UNED.

imagen de Isabel Tolosana

En uno de los lados, tenemos la Casa de la Vela y su reloj de sol. 
Ocupa toda la fachada, y resulta muy curioso y original.
Además, podemos ver los vestigios de una antigua corrala en uno de los lados.

imagen propia



imagen de Isabel Tolosana

En este punto, empieza a llover ligeramente, hace tanto frío que casi es agua nieve, y nos refugiamos un rato en el Mercado de San Fernando. Mucho más bonito por fuera que por dentro, se ha convertido en un lugar lleno de pequeñas tiendas, restaurantes y gastrobares.
Nada que ver con lo que eran los antiguos mercados de abastos. Pero es lo que hay.
Hoy en día todos estos antiguos mercados se han reconvertido en esto en mayor o menor grado.

imagen propia de otra visita anterior

En la zona que estamos visitando, tenemos otro edificio de lo más emblemático. Una construcción que ya hemos visitado en múltiples ocasiones: La tabacalera .
En un principio era la Real Fabrica de aguardiente, barajas y cartas.
Este edificio (el actual de la Tabacalera) está realizado por el arquitecto Manuel Ballina.
En el XIX, el monopolio del aguardiente pasa a la Condesa de Chinchón (olé ahí ese enlace de ideas) y el de las cartas a Fournier en Vitoria.
Pero Fernando VII pone una serio de productos protegidos por la corona (el tabaco o los sellos entre otros)
Esta fábrica de tabaco acogía a unas 600 mujeres al principio, llegando a ser casi 10.000 en su momento de máximo apogeo, a mediados del XIX.

Estas mujeres fueron las primeras trabajadoras que se organizaron en sindicatos, luchando por sus derechos. Trataban de encontrar la conciliación familiar, cambiando los turnos y cubriéndose entre ellas.
Traían su propio material y como curiosidad, eran unos puestos que pasaban de generación en generación .
En 1887, con la revolución industrial, empieza a haber muchos cambios. Entran en juego nuevas máquinas y horarios. Se crea una unión sindical a principios del siglo XX.
Se agrupan también otros gremios, como las verduleras, como ya vimos en una visita pasada.

El barrio crece en torno a la fábrica y se crean residencias para mayores, guarderías... Se daban charlas por parte de mujeres influyentes, como Clara Campoamor o Victoria Kent.
En el 2.000 se cierra y privatiza y queda abandonada.
Ahora se intenta su reutilización, pero con poco éxito.


Entrada principal. Por esta puerta entraban y salían las trabajadoras - imagen propia


imagen de una tabacalera en pleno funcionamiento - web de la Tabacalera

También nos pasamos por la Corrala de Mesón de Paredes, conocida también como la del Sombrerete, que es bien chula.
La Corrala se organiza en torno a patio central estrecho y mal iluminado, (aquí faltaría la otra mitad, en teoría debía haber otra parte simétrica que ha desaparecido).
Este tipo de construcciones se ha llamado "chabolismo vertical" por la precariedad de las mismas. Y tiene mucho que ver el éxodo de los pueblos hacia las ciudades, en busca de trabajo y oportunidades nuevas.

Cómo estaba la Cerca de Felipe IV, que no se derriba hasta el siglo XIX, Madrid no puede crecer en horizontal, así que en muchas ocasiones lo hace en vertical.

Aquí podían llegar a vivir 1.000 personas, en unas condiciones no demasiado buenas, ya que apenas podía haber uno o dos baños por planta (y por supuesto solo el retrete).

Hoy resultan monísimas y chulísimas, pero claro, si nos trasladamos mentalmente al siglo XIX, no resulta nada romántico.


imagen propia de otra visita


Bajamos hasta la plaza de Lavapiés. Empezamos a especular un poco con los posibles orígenes de tan curioso nombre:
1. El propio hecho de lavar los pies, había una fuente antes de entrar a Madrid, y los viajeros se aseaban antes de entrar a la corte.
2. Las calles están bastante en cuesta, y cuando llueve cae muchísima agua. Cualquiera que esté por aquí un día de lluvia puede experimentar en carne propia lo que es un auténtico "lavado de pies"

Por la calle de la Fe subimos hasta San Lorenzo, una de las pocas iglesias con las que cuenta el barrio Dato curioso, parece ser que solo hay tres, la de San Cayetano, San Lorenzo y el oratorio del Olivar, en la calle Cañizares. Puede ser debido a que era la antigua judería o bien a que, al tener unas calles tan empinadas y estrechas, nunca fue elegido lugar para la construcción de iglesias.
San Lorenzo era conocida como la iglesia de las pulgas principios del siglo XX (como si en las otras no hubiera...) y es que, parece ser que hubo una especie de baby boom en estos momentos y en esta iglesia se realizaban bautizos "a lo bestia".

 
Fachada principal de San Lorenzo - imágenes propias

El altar mayor, se ve perfectamente a San Lorenzo con la parrilla y diversas escenas pintadas 
imagen propia 

San Lorenzo es el patrón de Lavapiés, y se celebra la fiesta el 10 de agosto.
Este santo era uno de los siete diáconos de la región de Roma hacia el 250 D.C. Fue martirizado unos pocos días después del martirio del papa Sixto II. El emperador en aquellos momentos era Valeriano y fue un gran perseguidor de los cristianos.

La tradición dice que este santo nació en Huesca, en la Hispania Terraconensis. Fue ordenado diácono por el papa, y es por ello el santo patrón de los diáconos. Encargado de administrar los bienes de la iglesia, así como el cuidado de los pobres. Se le considera uno de los primeros archiveros y tesoreros de la iglesia. Y es además el patrón de los bibliotecarios.

De modo anecdótico, la leyenda cuenta que, cuando estaba en la parrilla, sufriendo el martirio, de una manera un tanto chulesca, comentó "dadme la vuelta, que por este lado ya estoy hecho" (madre mía, el tema de las historietas, como es...)

De infovaticana.com:

Según las narraciones de San Ambrosio de Milán, mientras estaba siendo quemado en la parrilla, San Lorenzo exclamó: "Assum est, inqüit, versa et manduca", que se traduce como "asado está este lado, dame la vuelta y come".

En esta iglesia de San Lorenzo se reúne hoy en día gran parte de la comunidad sudamericana, sienten mucha devoción hacia ella.
Y la iglesia está llena de imágenes de vírgenes y santos relacionados con el culto en aquellos paises.


mi querido San Martín de Porres - Fray Escoba, que tantas alegrías me daba de niña, cuando leía un librito que había por casa

otra vista de la sala donde están estas imágenes

 la sede única (en el mundo) de la Iglesia Patólica. Situada en la Travesía de la Primavera, ofrece desde su inauguración en 2012 una especie de "misa bufonesca" los fines de semana (domingos a las 13:00 horas)
Fundada y dirigida por el autodenominado payaso Leo Bassi, rinden culto al pato de goma, dios de las cosas pequeñas y sin trascendencia.
Nunca he asistido a ninguna, pero Isabel promete que son todo un espectáculo de humor inteligente y concienciador. 
No apto para las mentes más conservadoras.

fachada principal del Paticano, sede principal (y creo que única) del culto patólico
imagen de Isabel Tolosana

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